Los familiares de los tripulantes del atunero 'Alakrana', secuestrados por piratas somalíes desde el pasado 2 de octubre, guardaron silencio y evitaron hacer declaraciones tras entrevistarse durante dos horas, en La Moncloa, con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.
A la reunión, en la que asistió un representante de cada secuestrado, contó con la presencia de la ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Elena Espinosa. Con el encuentro el Gobierno quiso tranquilizar a los familiares, explicarles la situación del buque e insistir en que el Ejecutivo está haciendo todo lo posible para liberar y a sus 36 tripulantes, de los que 16 son españoles.
Los familiares llegaron al recinto del Palacio de La Moncloa en dos autobuses y tanto a la entrada como a la salida evitaron hacer declaraciones a la veintena de periodistas y cámaras de televisión que esperaban en la puerta. Los primeros en abandonar las dependencias fueron los familiares gallegos y, cinco minutos después, le siguió el autobús en el que viajaban el resto.
Esta mañana las familias se entrevistaron también, durante poco más de media hora, con el presidente de la Audiencia Nacional, Ángel Juanes. Allí tampoco quisieron hacer declaraciones por considerar, según indicó Cristina Blach, hija del patrón del barco, y Argi Galbarriatu, hermana del capitán, que el actual es "un momento muy delicado" para la resolución del conflicto.
Juanes les ha escuchado, les ha explicado el procedimiento judical abierto en la Audiencia Nacional en relación con el secuestro y las posibles vías legales para atender la petición de los raptores respecto a los dos piratas que están a disposición de la Justicia española.