La Audiencia Provincial de Lugo volvió, no obstante, a rechazar sus pretensiones, por lo que se tendrá que conformar con la asignación que ya tiene.
Según La Voz de Galicia, algunos abogados consultados están asombrados, ya que además el caso puede abrir una puerta judicial importante debido a una ley que es muy protectora con los beneficiarios de las pensiones alimenticias. “Ya no es la cantidad que se reclame, es el fondo de la cuestión. Es desvirtuar una ley. El asunto puede levantar ampollas. Llegamos al punto de que los hijos pueden investigar el patrimonio de sus padres y en base al mismo pueden reclamarles una pensión superior. Hasta ahora, la ley estaba pensada más que nada para los divorcios y para garantizar que los hijos tuvieran sus necesidades cubiertas”, apuntó un letrado ante las preguntas de La Voz de Galicia.
La cruzada judicial es, de momento, un caso inédito en Galicia. La abogada lucense Reyes Costa, según el diario, fue la encargada de defender los intereses de los padres en el caso, y no niega su sorpresa por semejante esperpento. De similar opinión, dice La Voz de Galicia, era el juez, que planteó a los abogados llegar a un acuerdo previo al juicio, sin éxito.
La joven universitaria fue la que, supuestamente, no quiso llegar a ningún entendimiento y mantuvo su exigencia de la asignación de 800 euros y el pago de la vivienda en Santiago, donde estudia, que también estaba siendo pagada por sus padres.
La chica alegó en su momento que los 600 euros no eran bastantes y que sus padres tenían el patrimonio suficiente para aportarle los 200 euros que estimaba que eran necesarios para cubrir sus gastos. No obstante, y según La Voz de Galicia, los abogados de los denunciados demostraron que no sólo no los necesitaba, sino que tenía ahorros con los 600 que ya le pasaban.
Decepcionada con la primera sentencia, la universitaria trató de que la sentencia fuera revocada por la Audiencia Provincial, que no obstante, apoyó la resolución del juez.