L D (EFE) La Unión Federal de Policía (UFP) ha denunciado las continuas agresiones que vienen padeciendo los agentes destinados en la frontera de Melilla, así como la pasividad de las autoridades marroquíes que no actúan ante los numerosos incidentes que se registran.
En un comunicado, el sindicato policial ha informado de un nuevo suceso en la frontera Beni Enzar, protagonizado por un grupo de marroquíes instigados por un individuo "de sobra conocido por la Policía española", que lanzaron piedras y objetos contra los agentes.
El incidente se produjo a las 14:30 horas del pasado día 23, cuando a una ambulancia marroquí en servicio de urgencia se le franqueó el paso por el carril de salida, "gesto humanitario y de buena vecindad que realiza habitualmente la Policía española para evitar demorar lo mas mínimo su entrada en la ciudad si existen retenciones".
En ese momento, la ambulancia fue retenida por un marroquí, conocido por haber protagonizado numerosos incidentes contra las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, por lo que un subinspector de servicio intervino apartando al citado marroquí, que se encontraba "a escasos metros de la puerta de acceso a territorio español", en la zona internacional neutral conocida como tierra de nadie.
Según la UFP, la reacción del marroquí fue empujar al subinspector para dirigirse rápidamente hacia un lateral, donde cogió una botella de cristal y la lanzó contra los policías actuantes, uniéndose a él otros marroquíes "con la misma actitud agresiva".
Los policías españoles tuvieron que retroceder para no ser alcanzados, y una vez que la ambulancia pudo pasar, se vieron obligados a cerrar, por un breve espacio de tiempo, la puerta de salida para evitar los impactos de los lanzamientos de todo tipo de objetos.
Para evitar que el incidente fuera a más, asegura el sindicato policial, fue necesario realizar dos disparos de fogueo al aire, momento en el que cesaron los lanzamientos de objetos.
La Unión Federal de Policía de Melilla denuncia que ante tales hechos la policía de Marruecos no actuó, sino que, afirma el comunicado, poco después una persona, que se identificó como inspector de servicio, reclamó que se hubiera actuado en la zona internacional.
Según la UFP, corresponde a los políticos interpretar lo que establecen las leyes sobre las zonas que separan dos países, pero asegura que defenderá cualquier actuación policial ante las agresiones que reciban los agentes en la frontera.