El PSOE y el PP han decidido que Alberto Oliart, de 81 años, sea el nuevo presidente de RTVE. Las negociaciones las han llevado directamente José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy que consideran que con este nombramiento se garantiza la "independencia y pluralidad" del ente.
Pero no todo es oro lo que reluce si vemos la trayectoria de Oliart. Hay dos episodios especialmente significativos. Una entrevista concedida hace unos años al diario proterrorista Gara que le valió la crítica de Alfonso Ussía cuando todavía era columnista de ABC. Como bien decía Ussía en aquel artículo no es preciso entrar en el contenido de la entrevista ya que "un individuo que ha sido ministro de Defensa y anda ahora de picos y morreítos con los defensores del terrorismo, no puede pretender el homenaje o la admiración de la buena gente de la calle".
Ussía concluía: "Desde la ignorancia del contenido de sus declaraciones a Gara, mi humilde opinión me anima a calificar la presencia de Oliart en esos papeles de pago por su seguridad personal. De vergonzoso y extemporáneo arreón de cagalera". Un retrato del nuevo presidente de RTVE que nada tiene que ver con las edulcoradas palabras que le dedicaban este miércoles los portavoces de PSOE y PP, José Antonio Alonso y Soraya Sáenz de Santamaría.
Siguiendo los pasos de Herrero de Miñón, también ex ministro de UCD, tertuliano de la SER y amigo del nacionalismo vasco, Oliarte también hizo sus pinitos en la Fundación Sabino Arana, órgano ideológico del PNV. En 2004 participó en un seminario llamado "Azaña y Ortega: ¿Dos ideas de España?", que coordinaba Txema Montero, conocido por su etapa como abogado de etarras y antiguo miembro de Herri Batasuna.