Esto pone en entredicho no sólo la labor de la ministra, sino que hace dudar de la necesidad de un ministerio entero destinado a atajar la lacra social de la violencia doméstica.
Muchas declaraciones de intenciones y apenas ningún resultado, publica La Razón. La Ley de Igualdad sigue sin desarrollarse, y la del Aborto sólo ha conseguido crear polémica y división. La ley no se aplica porque, según Sandra Moneo, portavoz del PP en la Comisión de Igualdad, faltan los "medios necesarios y porque el Ministerio gasta el 60 por ciento de su presupuesto en gastos corrientes y de personal. No es normal que en algunas comunidades haya sólo cuatro policías para proteger a 100 mujeres".
Las cifras que maneja La Razón son demoledoras. Desde el 1 de enero han muerto 32 mujeres, y sólo cinco habían presentado denuncia. A pesar de la compañas de información, la creación de juzgados, las ayudas para maltratadas y las campañas publicitarias, nada parece estar funcionando.
Sandra Moneo dice que "lo único que el Ministerio ha hecho ha sido aprobar una ley del Aborto que nadie demandaba". "Conseguirá que se disparan las cifras de interrupciones del embarazo y que se utilice la píldora el día después como un anticonceptivo más", dice. Respecto a la violencia doméstica, "nos vendieron la bajada de los asesinatos, como si fueran brotes verdes" en lugar de hacer una "reflexión rigurosa del problema".
El número de mujeres asesinadas, desgrana La Razón, es un 45 superior en 2010 a la cifra de 2009 y "cada vez denuncian menos, porque no se sienten protegidas", recalca Moneo. Esto a nivel nacional. Porque a nivel europeo, la UE, por esto y por todo lo anterior, sacó los colores al Gobierno y presionó para que se apruebe la Euroorden antes de que acabe la Presidencia española, en escasas dos semanas, y que Aído proteja de una vez a las víctimas "en vez de ponerse medallas".
La polémica de la Euroorden se generó, recuerda La Razón, cuando la semana pasada la comisaria de Justicia Viviane Reading tachó de "chapucera" a la Presidencia española, por usar la UE como "marioneta" para sus propios intereses nacionales.
El PP ha pedido la comparecencia de Aído para hacer balance de una gestión que para Moneo "ha sido nefasta". La ministra tendrá que exponer el miércoles en el Congreso sus previsiones ante la inminente aplicación de esta norma, que entrará en vigor en julio, y también sobre la Ley de Igualdad de Trato y No Discriminación, cuyo proyecto, publica La Razón, será remitido al Parlamento en poco tiempo.
Mientras tanto, queda la realidad. Los juzgados están colapsados, los jueces no utilizan las pulseras antimaltrato encargadas por el ministerio por pura falta de información o por la existencia de denuncias falsas que, según el juez Franciso Serrano, están provocando el suicidio de muchos hombres.
El mensaje de Igualdad parece haber calado, pero materializándose en una sensación de indefensión, no de concienciación, y desconfianza en la Justicia. Porque en cuanto a denuncias, La Razón desvela que las víctimas apenas denuncian a sus verdugos: sólo cinco mujeres de las 32 fallecidas este año lo habían hecho.
"Todas las políticas de Aído se han quedado en símbolos", dice Carmen Guaita, vicepresidenta de profesores ANPE "Lo único que ha hecho es retocar libros de texto para modificar el género en algunos términos".