La Generalidad pagó 8.500 euros por cuatro informes para una oficina que nunca se creó

Los cuatro informes, a los que ha tenido acceso Efe, se refieren a la "Oficina de promoción de la paz y los derechos humanos" que la consejería de Relaciones Institucionales que dirige Saura quería poner en marcha. Los cuatro documentos exponen consideraciones preliminares sobre el tema que tratan, pero ninguno de ellos entra a desarrollarlo y se remite a un texto que debía ser elaborado posteriormente.

Fuentes de CiU han explicado que, cuando el diputado Jordi Turull solicitó copia de dichos informes, a partir del listado que disponía de estudios encargados por la Generalitat en 2007, le enviaron desde la consejería de Relaciones Institucionales estos cuatro folios, como si se tratase de los informes definitivos y con los correspondientes pagos ya realizados.

David Bondia, Xavier Pons y Montserrat Pi constan como autores de los tres informes pagados a 2.500 euros, mientras que Argelia Queralt cobró 1.000 euros por un estudio de la misma extensión. Varios de los párrafos de estos cuatro informes son calcados y aluden a la voluntad de "definir las líneas de actuación de la Oficina en materia de derechos humanos".

Cada uno de estos informes enviados a Turull cabe en un folio escrito por delante y por detrás y consta de dos únicos puntos: "descripción de las cuestiones específicas a tratar" y "consideraciones generales".

Esta mañana, Turull ha denunciado que la consejería de Saura pagó "más de 2.000 euros" por un informe que constaba de una sola página y que terminaba con una expresión coloquial: "Bien, creo que ya estoy". Sin embargo, la secretaría de Relaciones Institucionales ha negado en un comunicado haber encargado informes de una página y con un coste de 2.000 euros y ha acusado a Turull de "manipular la información".

La secretaría sí ha reconocido, en un comunicado, la existencia de un "trabajo técnico del doctor en Historia Contemporánea Xavier Domènech, encargado por la Dirección General de Memoria Democrática" que finaliza con la expresión: "Bien, creo que ya está". No obstante, este texto de dos páginas forma parte de un mismo paquete de informes, de 30 páginas en total, sobre asesoramiento y asistencia técnica a la Dirección General de Memoria Histórica.