Una auditoria realizada a RTVE durante 2008, cuando el ente público estaba presidido por Luis Fernández, revela graves irregularidades en ciertos aspectos. De hecho, la Intervención General de la Administración del Estado, dependiente del Ministerio de Economía, asegura en su informe que RTVE "obtuvo unas ventas por publicidad en 2008 de 596 millones de euros, de los cuales algo más de 103 millones correspondieron a la denominada publicidad especial" que se contrata mediante "órdenes que no acceden a ningún registro, con lo que se dificultan las labores de control".
Según cuenta ABC, esta auditoria seleccionó una muestra del 17% de los ingresos del ente, y que valió para evidenciar estas irregularidades. Así, aparecen "órdenes de compra que están sin firmar" o que en ocasiones "se modifican las condiciones originarias de la orden de compra sin que se deje constancia de ello".
Incluso, se denuncia que "pases de 45 segundos de duración facturándose según tarifa para 20 segundos".
Otro de los problemas que se encuentra en esta auditoria es el gasto de personal. En este sentido, añade que "el sistema retributivo variable del comité de dirección, con un bonus de hasta el 20 por ciento de su retribución fija, parece no estar amparado en normativa interna alguna".
Además, también aparece que "las retribuciones anuales del comité de dirección no se atienen a las pactadas en sus contratos" e incide este informe en que "en un año de pérdidas, que la dirección justifica por la supresión de un minuto de retribución variable ha supuesto un incremento retributivo de los directivos respecto el modelo anterior".