El ministro de Educación asegura que "en España el tema de la lengua se ha vivido con bastante normalidad. La inmersión lingüística y la lengua vehicular han conducido a garantizar lo que pide la Constitución: el deber de conocer la lengua y el derecho a usarla. Lo que no tenemos que hacer es una cuestión de enfrentamiento. Las lenguas son espacios de convivencia y no se defiende una lengua luchando contra otra ni usándola como arma arrojadiza".
En un ejercicio de cinismo, Ángel Gabilondo dice que "espero que en España no se le persiga a nadie por rotular de una manera u otra manera… pero si hay disposiciones legales, deben cumplirse".
Gabilondo defiende Educación para la Ciudadanía: "Quien conoce la enseñanza sabe que, si uno quiere adoctrinar, puede hacerlo en cualquier materia. Educación para la Ciudadanía está respondiendo a algunos déficits de valores cívicos y ciudadanos que son muy importantes para los niños. Es una asignatura más que hay que impartir bien".
El hermano del Iñaki Gabilondo defiende los regímenes de Cuba y Venezuela y niega rotundamente que sean dictaduras. "Yo no haría esa calificación. Las dictaduras técnicamente son otra cosa y nosotros sabemos bien lo que son. En estos países hay que profundizar en la libertad política y en los derechos humanos".