No contento con comparar este lunes la represión y la tortura en las cárceles cubanas con la censura de fotos de Gürtel en Valencia, Miguel Bosé desvela en El País lo que le gustaría hacer con los inmigrantes que osan tocarle un florero del chalé vendiendo discos piratas. "Estoy preocupadísimo por este culto a no pagar nada. Dentro de poco entrarán a robar la comida a los supermercados. Habrá que hacer leyes compatibles con todas las opciones".
Admirador fanático de Zapatero, al progre de ceja le parece que está naufragando a la hora de prohibir las descargas y le acusa de "desacreditar" a González Sinde. "Hay que forzar a los países que tienen los mayores servidores a crear un peaje mínimo. Empezaremos a no firmar con discográficas. Se pueden colgar canciones sueltas constantemente. Pero también es un hecho penal".
Por ello, este privilegiado de la vida que nació ya con el futuro solucionado, es partidario de enviar derechitos a la cárcel a los inmigrantes que vienen a España en patera a buscarse la vida y lo hacen vendiendo discos piratas en la calle. "Es que es ilegal", se justifica. "Cuando veo a un mantero con mis discos, tiro de la manta y llamo a la policía. Me está robando".
Sobre política, nada sorprendente. "De Esperanza Aguirre no hablamos", le dice a la periodista Daniel Verdú. "El PP es como un molusco pentacéfalo con tentáculos como medusas. Rajoy no es un líder. Es como una indigestioncilla".