La Gaceta cuenta este jueves que la vicepresidenta María Teresa Fernández De la Vega es actualmente propietaria de una vivienda en la calle Hernani de Madrid, cuyo valor asciende a 600.000 euros, mientras que su hermano vendió otro por más de 420.000 euros.
Sin embargo, este puso se encuentra en una finca que fue expropiada a sus dueños por el régimen de Franco y que fue vendido al Ayuntamiento de Madrid al Patronato de funcionarios del Ministerio de Trabajo, a quien se lo compraron tanto el padre como el hermano de la vicepresidenta.
En este sentido, María Teresa y su hermano Jesús consiguieron estas viviendas debido a que su padre, era abogado inspector del Ministerio de Trabajo. Wenceslao era un alto cargo de Franco aunque la actual número dos del Gobierno dijese que fue un represaliado del régimen franquista.
La finca en la que se encuentra esta vivienda fue expropiada en los años 60. Allí vivían familias humildes que incluso en las casas bajas tenían huertos y pequeños establos para el ganado.
La finca pasó posteriormente al Patronato de Funcionarios del Ministerio de Justicia que construyó pisos para sus trabajadores. En total a Wenceslao De la Vega el piso le costó 24.000 euros. María Teresa se quedó con su parte tras la muerte de sus padres.