El maquinista del atunero Alakrana, Víctor Bilbao, ha asegurado este martes que los piratas que les mantuvieron secuestrados 47 días "son animales y nos han tratado a nosotros peor (que a los animales)" y ha denunciado la terrible situación que sufren los ocupantes de otro barco retenido, el Ariana MV.
En declaraciones a los periodistas tras prestar declaración en los Juzgados de Guernica (Vizcaya) ante el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz y el fiscal Jesús Alonso, el maquinista ha dicho que durante su comparecencia ha explicado a ambos las circunstancias en las que se produjo el secuestro y que se ha detenido especialmente en detallar la situación del Ariana. Este carguero griego, a bordo del cual viajaban 24 tripulantes ucranianos, fue secuestrado el pasado 2 de mayo por piratas somalíes a 250 millas al sudoeste de las islas Seychelles.
Víctor Bilbao ha explicado que, el pasado 14 de octubre, los marineros del Alakrana fueron conducidos al Ariana, donde vieron a dos mujeres -una de las cuales ha dado a luz durante su cautiverio- y a una niña de once años que, según el marinero español, ha sido violada por los piratas. "Les dimos comida, fruta para el bebé y un poco de gasoil", ha relatado Bilbao, que ha reconocido que cuando fueron al barco no tenían intención de desprenderse de mucho combustible, pero que "cuando vimos el cuadro que había allí, dijimos: lo que sea".
El maquinista, a quien la emoción ha obligado a interrumpir varias veces su relato, ha dicho que el juez y el fiscal "se han quedado asustados" al conocer lo sucedido. "Si existen los derechos humanos, que se dejen del hijoputa del niño pirata que hay aquí –en referencia a uno de los detenidos que permanece en España, el conocido como "Abdu Willy"– y que se metan a rescatar a esa gente de alguna manera, porque van a morir", ha manifestado Bilbao.
El marinero se ha referido también a la gestión del Gobierno del caso del Alakrana, que ha calificado de "asquerosa", y ha asegurado que "el peor momento" fue cuando se anunció que dos de los piratas habían sido detenidos por la Armada. "Nos decían: si ellos no vuelven, vosotros no vais a volver; si vuelven con un pie cortado, vosotros volveréis con un pie cortado", ha dicho el maquinista, que ha agregado: "Ya puede el Gobierno cumplir el acuerdo que hayan alcanzado con ellos, porque si no el próximo pesquero español que apresen, que se prepare".
También el cocinero del Alakrana, Ángel María Diego, ha dicho que cuando se enteraron de las detenciones "sabíamos perfectamente que la habían cagado" y ha señalado que la primera reacción de los piratas fue de ira: "Cogieron el arma y estuvieron a punto de matarnos a todos".
Por su parte, Gaizka Iturbe, engrasador del buque, dijo que "sí temieron por su vida", agradeció la labor de la fragata española Canarias porque los militares "son gente que tiene un corazón de oro, se han volcado totalmente con nosotros y han estado al pie del cañón con nosotros". Asimismo, hizo también un llamamiento en defensa del "teniente de navio Barrionuevo, que fue quien disparó a uno de los piratas somalíes que permanecen detenidos en España, porque fue en defensa propia, ya que no sabía si los piratas tenían o no armas". "Me gustaría que ese señor volviera a su puesto porque ha arriesgado su vida por nosotros", afirmó.
Por su parte, el ayudante de cocina Juan Mari Vildosola dijo que él ha estado "cuatro días muy nervioso", pero que sus compañeros "lo han pasado mucho peor y algunos no han podido hacer frente y han estado muy caídos". Vildosola coincidió con sus compañeros en que el peor día fue cuando ayudaron al Ariana y recordó que "hasta había una madre y una cría de 14 años y dijeron que el hijo del jefe de los piratas violó a la cría, aunque yo no se más, he estado metido en la cocina y no he visto gran cosa".
También criticó que el Gobierno central "no ha movido un dedo" y lamentó que "los del Ariana están peor, porque los gobiernos no se mueven por ellos", cuando "hay que dar un buen escarmiento a los piratas, para ver si dejan de actuar así". En cuanto a la presencia de vigilantes privados en los buques, Vildosola consideró que "están más seguros que sin escoltas" y dijo que "si no hay otra cosa en tierra, hay que volver a la mar".
Por último, Andoni Gotxi ha mostrado tras declarar su agradecimiento por el trato recibido por parte de los medios de comunicación y ha dicho que el peor momento fue cuando los piratas se pusieron a disparar en el barco.