A pesar de las opiniones que aseguraban que su puesta en libertad era inminente, Samuel Benítez, el amigo de Miguel Carcaño imputado en el crimen de Marta del Castillo, seguirá en prisión. El juez ha rechazado el recurso en el que el abogado de Samuel alegaba que varios testigos confirmaban su coartada en el momento en que la joven fue asesinada y ha confirmado que permanecerá en prisión.
Una de las razones aducidas por el juez es que la coartada de Samuel no puede comprobarse porque "todos los imputados son personas que manejaban varias líneas de teléfono móvil", algunas de las cuales siguen siendo desconocidas tras meses de investigación e instrucción.
El magistrado de Instrucción 4, Francisco de Asís Molina, asegura que persisten los indicios de que Samuel Benítez, amigo del ex novio de Marta y su presunto asesino por confesión propia, ayudó a deshacerse del cuerpo de la joven, y argumenta que justificó su cambio de declaración en "circunstancias peregrinas": amenazas de la Policía, a las que no le da credibilidad porque "de forma insólita" se habrían producido "en presencia de su abogado". Lo cuenta El Correo de Andalucía.
Samuel Benítez se encuentra en la prisión de Huelva desde el pasado 16 de febrero y tuvo conocimiento de la declaración de Miguel y del menor antes de declarar ante el juez, "encontrándose con que durante las horas que ellos situaban los hechos él se encontraba en Montequinto", lo que le permitió cambiar su declaración "situándose como mero espectador de lo acaecido".
El juez deja de lado el cruce de llamadas telefónicas que sitúan a Samuel en Montequinto alegando que "todos los imputados son personas que manejaban varias líneas de teléfono móvil", algunas de las cuáles aún siguen siendo desconocidas, y que en "momentos coetáneos a su acción criminal utilizaron teléfonos de terceros o cabinas de uso público".
Por último, el juez reconoce que no conocen con exactitud a qué hora sacaron los imputados el cuerpo de Marta del piso de León XIII, pero "descarta de raíz" que fuera a la hora que dice Miguel (después de las 20.30 horas), ya que intenta "exculpar" a su hermano y a la novia de éste. Por ello, concluye que el cadáver pudo ser trasladado a partir de las 2.00 horas.
El auto incluso recuerda que "estamos ante personas que una vez dieron muerte a la menor Marta se encargaron de hacer desaparecer su cuerpo y de proporcionarse premeditadamente cuantas coartadas tuvieron a su alcance para evitar ser descubiertos". Además, resta “credibilidad” a la exculpación que Miguel hace de Samuel en su última declaración.
Por todo ello, el magistrado ratifica que hay suficientes indicios en su contra e insiste en el riesgo de fuga y obstaculización que Samuel podría hacer a la causa si saliera de prisión.