Se trata de un reportaje del día que la ex vicepresidenta del Gobierno tomó posesión de su nuevo cargo como consejera de Estado. En él, María Teresa Fernández de la Vega aparece en el la parte de atrás de un vehículo hablando con la reportera sin el cinturón de seguridad puesto.
El coche circula por las calles de Madrid mientras De la Vega cuenta a la reportera cómo se siente el día en que va volver a ponerse la toga. "Estoy un poquito nerviosa", confiesa. "Es la primera vez en siete años que no me pongo el despertador. He podido dormir ocho horas", dice sonriente sin percatarse de que está incumpliendo el código de circulación.
El vehículo se dirige a la sede del Consejo de Estado, en el Palacio de los Consejos, al final de la calle Mayor. Hay atasco, pero la ex vicepresidenta no se percata en ningún momento de que no lleva el cinturón puesto. Recibe una llamada de teléfono. Es Zapatero. "¿Sí? Hola presidente"; saluda. "La consejera está metida en un coche pero está llegando, no te preocupes que llego a tiempo de la toma de posesión. Oye, es que nos ha pillado un atasco enorme".
Rajoy se vio obligado a pedir disculpas públicas por su olvido. ¿Hará lo mismo De la Vega?