Para empezar, su posado se llevó a cabo sin las medidas de seguridad exigidas por la ley. A pesar de que Corbacho, que opta como candidato a las autonómicas catalanas, se puso el casco para aparentar soltura con la maza, le faltaban las gafas, así como los guantes, la mascarilla y las botas de seguridad.
ABC nos obsequia con un impagable fotomontaje en el que se aprecian las diferencias entre la realidad y lo que debería haber sido, en una imagen en la que el futuro ex ministro de Trabajo sí aparece con todo el equipamiento, y no hay color en comparación con la instantánea del momento real.
El instante, en el que el ministro fue cogido in fraganti, se puede comparar con aquel recordado y famoso despiste de Mariano Rajoy hablando a los votantes del PP de camino a su retiro vacacional, y sin cinturón de seguridad.