a si son. resentidos y malas personas, tanto uno como el otro, es bueno que entre ellos se destruyan, la verdad que no me dan pena. se quedan sin argumentos, pero moriran matando.
Heinrrich Dasspena ciertamente es servil al sespotismo, primero de Franco ahora de l dictadura del progretariado.
¿En qué lugar queda Carnicero que le ha servido a su vez?
En el de Cagancho en Almagro por ejemplo, o Rufete en Lorca vale.
Carnicero no me da demasiada pena. Ha medrado en medios de izquierda lavando la cara al PSOE.
Tanto recurso al Opus en el artículo no es necesario, hay servilismos compartidos más recientes e igualmente penosos.
No tenéis principios ninguno de los dos, que os den.
Caniche ladrando a Can.
Hombre ¿qué quiere que le diga?
Sopena es Sopena, caso difícilmente superable.
Pero Vd., Don Carnicero, tampoco se ha lavado la boca todos los días ¿eh?.
No hay mejor cuña que la de la misma madera.