La Cámara de Cuentas de la Comunidad de Madrid se ha llevado una gran sorpresa al analizar las cuentas de la Universidad Complutense. Es tal la gravedad de lo sucedido que han decidido realizar una segunda visita para cerciorarse.
Según informa La Gaceta, Carlos Berzosa cogió a la Universidad Complutense sin deuda y en este momento ya oscila en los 150 millones de euros, a falta de que la Cámara de Cuentas concrete la cantidad del dinero que adeuda la institución educativa.
Gran parte de esta cantidad, unos 80 millones se refiere a deudas con proveedores, suministro de equipos, luz, electricidad o gastos corrientes. El resto del montante se debe a Hacienda y a la Seguridad Social, unos 30 millones en total así como otros 45 a la Fundación General de la Universidad.
El dinero que se debe a esta fundación se refiere básicamente a fondos destinados a financiar proyectos de investigación. Sin embargo, estos fondos han tenido que derivarse para pagar nóminas del personal y otros gastos.
De hecho, algunos proveedores llevan dos años sin cobrar por parte de la Complutense. Es el caso de Iberdrola, que al ver la situación amenazó con cortar la luz si no pagaba. La respuesta de Berzosa fue clara: nada de pagar, sino que decidió dar por concluido el contrato con esta eléctrica para contratar a Unión Fenosa.