El último político en opinar sobre el asalto a dos hipermercados por parte de Gordillo y sus compañeros de sindicato ha sido el actor y diputado Toni Cantó, que ha escrito una carta abierta en el Huffington Post, dirigida al alcalde de Marinaleda y a quienes le apoyan, en la que desmonta sus argumentos.
Cantó comienza su misiva recordando que a Gordillo le gusta "ser fotografiado junto a dictadores como Castro" y a su partido, IU, no le ha importado "pactar poltronas" con Griñán olvidando su programa. También apunta que cargos de la coalición y el propio alcalde han colocado a allegados en la administración "sin importarles un pimiento ninguno de todos esos andaluces a los que quieren ahora alimentar".
Después, el actor le da a Gordillo varias alternativas al de asaltar supermercados. Dice Cantó que "en vez de enfrentarse valientemente con varias cajeras" del Mercadona "podría habernos demostrado su valor probando con un banco o un furgón blindado" de esos que "demoniza a menudo y que están guardados por polis hechos y derechos". Recuerda, además, que en el caso de los bancos desde su partido han preferido acudir a la Audiencia Nacional "por aquello de la legalidad" y "porque no están las cosas para que un político irresponsable juegue con el fuego que casi prende ya a muchos españoles que las pasan canutas".
También sugiere Cantó que Gordillo podría haber empezado por criticar a cargos de su partido que han cobrado de las cajas, por impedir la condonación de créditos a IU por parte de Caja Castilla-La Mancha, por parar "la compra de coches para los portavoces del parlamento de Andalucía por valor de 60.000 euros" o "quitarse un sueldo que la mayoría de alcaldes de pueblos de tamaño similar al suyo no cobran". "Hacer política", en definitiva, dice Cantó.
Lo que ocurre, según el diputado, es que en realidad Gordillo "no quería alimentar a nadie" con su acción sino "salir en los papeles", algo que ha conseguido. Y tras ironizar con la reacción que ha suscitado el robo en todos los partidos, Cantó dice que él lo tiene claro: "Para salir de esta, prefiero empresarios que crean puestos de trabajo a los señores Gordillos". "Esto no es una lucha de ricos contra pobres, como nos venden de manera simplista los Gordillos. Es un pulso entre honrados y ladrones, entre trabajadores y apoltronados", concluye.