La Generalidad de Cataluña continuará subvencionando este año a las "comunidades catalanas del exterior", con el fin de que promuevan y difundan la cultura y la lengua catalanas. No sólo eso, sino que los fondos públicos otorgados podrán ser utilizados también para la reforma y rehabilitación de las sedes así como para financiar los gastos ordinarios de su funcionamiento.
Las subvenciones concedidas por este motivo, según reza la convocatoria, cubrirán especialmente "los gastos de organización de actividades culturales de difusión y promoción de Cataluña, su lengua, cultura y tradiciones que se organicen, con carácter de programación habitual de actividades, con carácter extraordinario o gestionadas por jóvenes miembros de las comunidades catalanas". También los cursos de catalán que estos centros catalanes en el extranjero ofrezcan a los nativos estarán en parte sufragados con cargo a estas ayudas públicas que reparte el gobierno regional de Cataluña.
Quedan excluidas del ámbito de estas ayudas cualesquiera otras actividades organizadas por las casas regionales catalanas que "no impliquen la difusión y promoción de cultura y lengua catalana". De esta forma la Generalidad de Cataluña impide que las comunidades catalanas subvencionadas puedan organizar actividades para difundir la cultura propia del país donde están ubicadas utilizando su ayuda económica.
Aunque resulta preceptivo en toda orden de convocatoria de subvenciones, en este caso el gobierno catalán no indica la cantidad económica que dedicará en total a estas ayudas públicas, cuya tramitación queda confiada a la Secretaría de Asuntos Exteriores (sic) del ejecutivo presidido por Artur Mas.