El Mundo cuenta en portada el lío en el que está metido Urdangarín, a quién "Anticorrupción acusa de apoderarse de fondos públicos" y el repentino ataque que le ha dado a Conde Pumpido, que "se abstiene de la operación Campeón por su amistad con el ministro" Blanco. "En contra de lo difundido por algunos medios en el sentido de que Conde-Pumpido iba a maniobrar a favor de Blanco (...) lo cierto es que la posición que ha mantenido la fiscalía de Lugo es que hay indicios de tráfico de influencias contra el ministro". ¿A quién va dirigido el sopapo?
En el sosiego del día después, Jiménez Losantos habla sobre el "Debatongo". Y es que "cuantas más horas pasan", peor lo lleva. La "parte final" del "espectáculo que nos sirvió Campo Vidal, camarero de la trujamanería electorera que nos brindaron los dos ilusionistas" estaba "groseramente pactada y zafiamente ejecutada". Tras dejar claro que él prefiere que Rajoy "pese a su infinita torpeza leyendo esos papeles" ganara el debate, le advierte: "pactar con Rubalcaba" no tocar algunos asuntos a cambio de que "el héroe del 13-M pueda volver a serlo a la vuelta de pocos años (...) lo pagará él y lo pagaremos todos. Al tiempo". Ay madre, que eso suena fatal.
Casimiro García-Abadillo regaña al PSOE por estar contentos con el debate. "El que no se consuela es porque no quiere (...) Rubalcaba erró en el debate. Estuvo nervioso, utilizo informaciones falsas", dice el muy remilgado como si eso fuera importante. "El tiempo se acorta y corre en contra del candidato socialista. Cuanto menos se quiera reconocer la realidad, mas negro será su futuro". Pero déjele disfrutar, Casimiro, hijo, a ti qué más te da, ni que te escociera.
El País nos sorprende en portada con un tema nuevo. "Camps -¿quién es Camps?, se preguntarán a estas alturas- pagó 15 millones de euros a Calatrava por un proyecto que nunca se hará". De Calatraba ni hablamos.También cuenta una propuesta que ha hecho el PP sin aportar "demasiados detalles". En un par de párrafos dice que se privatizarán las televisiones autonómicas, habrá un canal único autonómico con desconexiones territoriales, se integrará la agencia EFE en TVE y se eximirá a los canales privados de financiar el cine. Pero El País tiene razón. Es verdad que no está detallada la página en la que aparecerá publicado en el BOE.
Y con un desánimo que raya en la depresión dice que "los socialistas están convencidos de que el debate fue muy útil para su estrategia (...) porque nadie piensa en la posibilidad de la victoria". Pero fue un "revulsivo para los indecisos" porque "lo que se juega el PSOE es un resultado digno que le permita reconstruir el partido". ¿No les un poco de penilla? Y mientras Rajoy, ahí le tienes, si "mantenía una campaña fría, ahora puede lanzarse a una casi ultracongelada" esperando a que sea Rubalcaba –ojo al bofetón de Fernando Garea- "el que siga cometiendo errores".
A ver si aprenden de Público, que inmune al desaliento nunca tira la toalla. Miren lo contentos que están porque "el PSOE encuentra en el debate oxígeno para su campaña, creen revivir tras el cara a cara". Y la alegría llega al paroxismo contando que "los socialistas se encontraron con un aliado inesperado" para "despertar a sus votantes durmientes". Aznar "irrumpió en la campaña" y es, según ellos, un "catalizador para la movilización de la izquierda". Ya. ¿De qué izquierda?
La Gaceta dice que "la policía judicial acosa a Urdangarín" y Carlos Dávila hace una férrea defensa del duque arremetiendo contra el juez. "El juez Castro no quiere retirase sin dar la campanada. Es un profesional extraño (...) se siente más protagonista que Garzón, que creo, es su auténtico ídolo". Y es que tiene una horrible sospecha. "¿Se está utilizando este asunto para ocultar el de Blanco?".
El periódico echa a cara a Pumpido que reconozca ahora ser amigo de Blanco y se retire de la causa. "No se apartó cuando colocó en la causa al fiscal de Lugo, próximo a él". Bueno, "más vale tarde que nunca", pero que no se haga ilusiones, no hay perdón que valga. "Ahora a Pumpido le da un ataque de imparcialidad y trata de limpiarse de las salpicaduras del escándalo Blanco. Demasiado tarde".
Menos mal que Genoveva nos alegra el día contándonos un chiste buenísimo que circula entre los socialistas. "¿Sabes por qué Rubalcaba tiene la conciencia tan limpia? Porque no la usa nunca?". ¿A qué mola? Pues a Genoveva no le gusta. Dice que es convertir "en vicio la virtud política". Que poco sentido del humor, no hay que ser tan serio, hijos, venga una sonrisita.
ABC insiste en el titular de ayer o algo más o menos parecido. "Rajoy arrolló a Rubalcaba". Que ya, hombre, que ya. "El protagonismo de Rajoy, como claro vencedor de la contienda, fue absoluto (...) el pronóstico de que Rubalcaba barrería a Rajoy en un cara a cara falló con claridad" y "el extremismo de Rubalcaba fue una renuncia a ese electorado sin ideología definida". Para completar trae una información en exclusiva. "El PSOE pide que se remodele el despacho del jefe de la oposición". Vamos, que Rajoy vaya quintado la foto de Viri y los niños y haciendo la mudanza. Qué prisas, por Dios.
Y La Razón abre portada con algo que nunca habríamos sospechado "Rajoy tiene ‘La Razón’". El titular acompaña a una foto en la que el líder del PP aparece leyendo este periódico. Marhuenda sigue encantado con el debate que Rajoy "ganó claramente" y se felicita de que "la práctica totalidad de los medios, incluidos algunos de los más cercanos al PSOE, limitó cualquier intención de falsear el desenlace". En la página siguiente, Carlos Alsina le pone los puntos sobre la íes y a Rajoy a caer de un burro. "Discrepo de la opinión mayoritaria y de la conclusión a la que ayer llegó este diario. Rubalcaba va a perder las elecciones, pero ganó el debate". Rajoy estuvo "esquivo y rutinario", "ya todo le resbala", "resultó burda su forma de taparse", es más, "me pareció decepcionante su falta de soltura en el manejo de conceptos clave". Hablando de desempleo, contratación, pensiones "se apaño con cuatro generalidades. A una semana y media de convertirse en presidente electo, ya va tocando bajar al detalle". Y un toque de atención a sus compis. "Una cosa es que todo el mundo entienda la táctica del hombre invisible y otra, que se jalee". Pues sí que discrepa, sí.