El portero de la Real Sociedad, Eñaut Zubikarai, no jugará la próxima temporada en el Hércules. El club alicantino alega que no ha habido acuerdo económico para lograr la cesión del portero, aunque todo apunta a que la relación del portero con el mundo etarra ha tenido mucho peso en la ruptura de las negociaciones.
Eñaut Zubikarai es hijo de Cándido Zubikarai, etarra que cumple condena desde 1989 tras su participación en un atentado que causó la muerte a dos guardias civiles en Guernica. Además, su madre también fue detenida junto a su marido el mismo año en el que ingresó en prisión, tal y como informó El País.
El Hércules no conocía los antecedentes delictivos del padre del portero, y su única preocupación fue valorar las cualidades deportivas de Zubikarai. Al surgir la noticia, gran parte de la afición se crispó y, para no dañar las relaciones entre clubes, el Hércules alegará falta de acuerdo económico con el jugador. Según informa El Mundo, fuentes del club dicen: "Cuando interesa un jugador nos fijamos en sus cualidades, no en si es de derechas o de izquierdas o si le gustan los hombres o las mujeres. Pero esto es un tema que puede herir la sensibilidad de mucha gente". "Sabíamos que su estética era la típica ‘abertzale’, pero como la de tantos otros jóvenes vascos", añaden desde Alicante.
Eñaut Zubikarai siempre ha sido un activista proetarra e incluso se ha manifestado a favor de los etarras condenados, como por ejemplo su padre. En este sentido, el jugador realista acudió el 19 de junio de 2009 al festival "Hartotxu Rock" y subió al escenario junto a docenas de personas, entre ellas varios niños, con carteles de presos etarras. Él mismo sostenía uno, como se puede ver en la foto, en el que entre otros aparece su padre (el de la barba).
Además, Zubikarai, junto a otros siete jugadores más de la Real Sociedad, se adhirió a la manifestación convocada por el entorno de ETA en marzo, en la que se exigía el traslado de los terroristas de la banda encarcelados a prisiones del País Vasco.