Provoca menos interaciones en la salud general del paciente a diferencia de otros retrovirales. Eso es importante porque las enfermedades hepáticas y cardiovasculares son al final la principal causa de muerte de los pacientes infectados con VIH.
El fármaco, que ya había sido aprobado en 2008 para pacientes que seguían otros tratamientos, pertenece a una familia distinta de los inhibidores de la proteasa, la clase de fármacos utilizada hasta ahora.
El jefe del Servicio de Infecciones del Hospital Clínic de Barcelona, Josep Maria Gatell explica que es una "buena noticia" porque amplía el número de medicamentos disponibles para el tratamiento inicial.
En concreto, Gatell consideró que "Raltegravir" ofrece mejores resultados para pacientes con mayor riesgo cardiovascular, para aquellos que requieren medicación adicional e incluso para mujeres embarazadas, ya que presenta menos interacciones. El experto precisó que el porcentaje de enfermos de sida que se beneficiará desde un principio del nuevo fármaco será "modesto".
El “Raltegravir”, comercializado por la farmacéutica “Merck”, es el primero de los fármacos autorizados para enfermos de sida que se centra en impedir que el ADN del virus se integre en el ADN de la célula. Otras compañías trabajan en el desarrollo de fármacos de esta familia, en el contexto de un mercado que cada vez ofrece más opciones a los enfermos y a los médicos.
En cualquier caso, Gatell quiso dejar claro que “Raltegravir” presenta efectos secundarios. Por ello, precisó que, si bien es positiva su entrada en el mercado porque según los estudios realizados presenta "menos interacciones" que otros, no será un fármaco que utilicen todos los nuevos infectados de sida.
El precio es de 23 euros diarios, más de 8.000 euros anuales para cada enfermo, aunque existen acuerdos puntuales con cada hospital para suministrarlos a un precio reducido.
Según una investigación española publicada en la revista Current HIV Researchen la que ha participado junto a otros autores el doctor Esteban Martínez, las enfermedades hepáticas y las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte no relacionada con el sida en pacientes infectados con VIH a pesar del tratamiento antirretroviral.
El VIH-sida está relacionado con la aparición de enfermedades crónicas al igual que el resto de la población pero en edades más tempranas. "Los pacientes seropositivos envejecen antes, sufren más enfermedades crónicas y su pronóstico puede ser peor", añade Martínez.
En ese sentido, un estudio en el que ha participado el "Hospital Clínic" demuestra que Raltegravir consigue la supresión del virus con una buena tolerabilidad y sin apenas interacciones a diferencia de otros fármacos”. Así, el objetivo del tratamiento ya no debe ser sólo la eficacia sino también la salud general del paciente. Hoy en día existen nuevos fármacos que son bien tolerados y que mejoran la calidad de vida del paciente.
Más sobre el VIH-Sida
Según datos del Ministerio de Sanidad, entre 120.000 y 150.000 españoles están infectados por VIH. Alrededor de la mitad de ellos presenta también el virus de la hepatitis C y en torno al 7 por ciento, hepatitis B.
La OMS estima que en los países occidentales uno de cada tres infectados no sabe que está enfermo, lo que facilita que el virus siga circulando. A finales de 2008 había 33,4 millones de infectados por el VIH. Ese mismo año se infectaron 2,5 millones de personas y 2,1 millones murieron de sida, entre ellos 280 000 niños. En España, según datos del Ministerio de Sanidad, desde el inicio de la epidemia se han identificado 77.953 casos de sida.