Los farmacéuticos de Barcelona han advertido que si la Administración no les abona lo que les debe se verán obligados a dejar de dispensar medicamentos de la Seguridad Social y sólo facilitarían aquellos que se paguen al contado.
Según informa La Vanguardia, hasta ahora la Administración catalana lleva un retraso de dos meses en los pagos de las facturas de los medicamentos. En este sentido, Elena Carazo, representante de los más de 200 farmacéuticos que se han manifestado, asegura que el presidente del gremio "se ha movido por todas partes, lo ha intentado todo y no tiene respuestas. Por ello, avisan que si no se llega a ningún acuerdo con la Generalidad y no se obtienen créditos de los bancos temen que tengan que dejar de dispensar medicamentos de la Seguridad Social.
De este modo, asegura que "es lo último que nos gustaría hacer porque hay mucha gente que no podría hacer frente al gasto de sus medicamentos, pero nosotros, como farmacia, tampoco tenemos dinero para pagar la medicación del barrio. Por eso, buscamos un acuerdo para no tener que tomar esta medida drástica". "No es que no queramos, es que no podremos soportar este gasto".
Y es que hasta el 70 por ciento de los medicamentos que se dispensan en la farmacia corresponden a recetas de la Seguridad Social. Ya el consejero de Salud, Boi Ruz, aseguró el pasado 23 de septiembre que los pagos que antes se hacían en 30 días, ahora se podrían alargar "hasta los 60 o 70".