Unas cuarenta personalidades de los negocios y del dinero han enviado una carta a Barack Obama para que levante el embargo. No me extrañaría que esa carta, muy en el estilo del Pacto del Zanjón, haya sido redactada entre el Consejo de Estado castrista y la Oficina Oval estadounidense.
Lo cierto es que Obama ha ido levantando el embargo poco a poco, y como si con él no fuera. La carta la hicieron pública el día 20 de mayo, conmemoración de la independencia de la República de Cuba. Una carta que sólo demanda más esclavismo para los cubanos, más dependencia del régimen de los Castro, y desde luego, de los Estados Unidos, y el enriquecimiento de los aprovechados de toda la vida.
Es una carta para llorar, José Martí murió en Dos Ríos, un 19 de mayo de 1895, luchando en contra de cartas y actitudes como esas. Martí habría reprobado profundamente esa carta. Pero claro, Martí era un poeta, un escritor, y no un hombre de negocetes.
Tras la carta famosa hoy, a las ocho de la mañana, hora de Cuba, saldrá al aire el ya celebrísimo periódico de Yoani Sánchez, 14 y medio. Tal como con su blog Generación Y, el periódico todavía no ha salido y ya se ha escrito más de él en la prensa que de ningún otro medio, incluidos los periódicos digitales de las luchadoras iraníes, periodistas todas ellas. Es un periódico con suerte y con mucho money detrás, de ahí la enorme publicidad.
Uno de los twitters publicitarios del periódico dice que "usted podrá leerlo mientras se bebe el café mañanero". ¿Qué café? Si la gente en Cuba no tiene ni café ni agua de chirle para desayunar. ¡Bah!
La primera mentira: no se trata como se ha afirmado del primer periódico digital cubano. Ya en Cuba se han publicado otros periódicos digitales. Como Primavera Digital, órgano de prensa digital que empezó a existir a raíz de la Primavera Negra del 2003, con periodistas independientes. Sin tanto secretismo y majomía como el que ha rodeado al de la bloguera.
Granma era el periódico de Castro I. Castro II necesitaba un periódico a su medida, ahí lo tiene. Más claro ni el agua. Ya un medio francés anuncia con bombos y platillos las nuevas aperturas de la libertad de expresión en Cuba, gracias al medio de la famosa chica del piso 14 habanero.
Entre la Carta que firman algunos, por supuesto de los que costean el nuevo periódico, Cuba está servida en bandeja de plata para que los nuevos ricos cubanos (entre los que se encuentra la "disidente") y los ricachones del Opus y de otros tantos bandos se dividan la isla a como les toque al mejor postor. Siempre, desde luego, bajo el poder de la mafia castrista.
Nada, otra carta para llorar, y otro periódico que ni siquiera servirá para lo que servía el Granma, para limpiarse el trasero a falta de papel higiénico. Dado que es digital.