La semana pasada asistimos a uno de esos espectáculos –tan habituales en Cataluña– que combinan en partes iguales la vergüenza y la cara dura, que fue ver a los sindicatos oficiales y a los partidos que gobiernan en todo lo gobernable en Cataluña manifestándose contra la crisis –como si no fuera con ellos– bajo el lema "Cemento Portland contra la crisis", que es como tienen la cara algunos. La manifestación estaba encabezada por el rehabilitado y reinsertado Josep María Sala y por el compañero José Zaragoza, líder del PSC, que dispone de veinticinco diputados en el Congreso. Diputados que han votado que sí a unos presupuestos falsos en su elaboración y que en el momento de ser aprobados el ministro Solbes reconoció que estaban desfasados; vayan ustedes a manifestarse contra la crisis a Montmeló, donde, si no hay carrera, al menos no molestan a los contribuyentes a los que insultan. Yo creo que sólo les faltó salir a la calle con huchas como en el día de la Cruz Roja y pedir una ayudita a los transeúntes. Eso sí, la hucha transportada en coche oficial.
Y como la actualidad es un no parar, resulta que Soraya Sáez de Santamaría ha decido volver a las revistas de moda y tendencias, cosa que a mí me parece muy bien, que para eso soy liberal; que haga lo que crea conveniente en el momento que le parezca oportuno. Lo que sí me ha llamado la atención es que la señora portavoz se queje en una revista de moda de que no se le valore por sus discursos y por sus chistes tan bien traídos; es como las famosas que sacan a los niños y niñas, naturales o de importación, en la portada del ¡Hola! y luego se quejan cuando los fotógrafos callejeros les atizan con el flash.
Especial interés me despierta la siguiente frase referida a la ministra Chacón: "Carme y yo llevamos mucha mili juntas desde que nos nombraron a las dos. Y nos preguntamos por qué con los problemas tan importantes que hay en este país nuestra imagen focaliza la atención pública". ¿A ver si va a ser porque vosotras lo provocáis, pareja? Se compara la señora portavoz con las críticas a la ministra por el famoso atuendo y engominado. Está claro que los episodios fotopolémicos en los que se han visto envueltas los han provocado ellas y si quieren que los votantes valoren su condición de políticas y no sus prácticas como modelos, no deberían meterse en jardines o no deberían quejarse.
Entiendo la cortesía entre los políticos, pero para próximas portadas, le aconsejo a la señora portavoz que si quiere decir algo de la señora Chacón le recuerde que en la campaña electoral de 2008 dijo de Pizarro que era un hombre que traía el odio y el rencor contra Cataluña. Que comparó a su jefe, don Mariano, con un asesino a sueldo con eso de "Si tu no votas ellos vuelven". Que su partido multa a los catalanes que rotulan en castellano en esta parte de España. Que su partido está al borde de la presunta prevaricación en Cataluña por el tema de las casillas. Que se autoproclamó la "niña de Felipe", no constando una reserva expresa de la corrupción felipista. Que hizo buena a la ministra Trujillo y que, puestas a hablar de propaganda, ha utilizado el cargo y el embarazo de la forma más demagógica posible. Yo, al menos, la valoro por eso y no por el smoking; además de querer para Cataluña una financiación insolidaria e injusta con el resto de España, aunque eso también lo quiera el PP de Cataluña, sin que la señora portavoz sea capaz de llamarles al orden.
En definitiva, no se preocupe, señora portavoz, ya se le valora como política, otra cosa es que no le guste la nota.