La situación de la enseñanza española es desastrosa. En especial, la Secundaria está viviendo sus peores momentos. La LOGSE fue una catástrofe, la tímida LOCE del PP ni siquiera llegó a entrar en vigor, la actual LOE ha sido una siniestra vuelta de tuerca, y, para colmo, las leyes educativas autonómicas se han dedicado a desintegrar lo poco que quedaba.
Hoy los profesores están siendo utilizados para labores doctrinarias, burocráticas y de vigilancia a costa de su labor original, que es –o debería ser– enseñar. La autoridad, la disciplina y el rigor académico han desaparecido de las aulas. Los institutos públicos, que cumplían una función de ascensores sociales y culturales, han quedado como carísimos servicios de guardería para adolescentes. Los casos de falta de respeto y de violencia no dejan de crecer.
Los esfuerzos de quienes crearon el desastre están dirigidos a disimular sus efectos, a maquillar las estadísticas y a mentir a través de los medios de propaganda oficiales. Fíjense que cuando hasta la Iglesia pide perdón por los casos de pederastia, el PSOE no pide perdón ni rectifica por haber condenado a varias generaciones de españoles a la ignorancia. Y la pedagogía logsiana no deja de ser un tipo de pederastia intelectual que deja aniquiladas culturalmente a sus víctimas.
De todos modos, aunque los institutos están sumidos en la desesperanza, todavía hay núcleos de resistencia contra la burricie oficial. Ha nacido en Andalucía, pero con vocación española, una asociación de profesores de instituto (PIENSA) que está plantando cara a las autoridades deseducativas autonómicas y nacionales, y se está dedicando a proporcionar a sus colegas aprovisionamiento intelectual, munición dialéctica y razones para la rebeldía. Pues para PIENSA va mi letrilla de hoy.
Si quieres ser profesor
y enseñar tu asignatura;
si de ciencia y de cultura
intentas ser transmisor;
si no tienes valedor
contra el insulto y la ofensa...
¡Piensa!
Si no quieres ser guardián,
burócrata ni payaso;
si consideras fracaso
aprobar al holgazán;
si te esfuerzas con afán
y nadie te lo compensa...
¡Piensa!
Si te quejas con motivo;
si con razones te enfadas;
si de las pedabobadas
eres rehén y cautivo;
si al sistema educativo
le das la nota suspensa...
¡Piensa!
Si quieres sólo enseñar
y no dar gilidoctrina;
si a la burda moralina
no te quieres doblegar;
si a la excelencia escolar
nunca le dan recompensa...
¡Piensa!
Si quieres reconstruir
lo que la LOGSE arruinó;
si quieres decir que no
al presente sinvivir;
si no te quieres pudrir
sin dignidad ni defensa...
¡Piensa!
Si constatas que en la ESO
disminuyen los niveles;
si burocracia y papeles
ves aumentar con exceso;
si te venden por progreso
la mentira más inmensa...
¡Piensa!
Si en la malaventuranza
guardas tal vez ilusión;
si entraste por vocación
en esto de la enseñanza;
si queda algo de esperanza...
en esta voz se condensa:
¡Piensa!