Ya no es cuestión de si se van a salir con la suya, de si el Gobierno va a hacerles concesiones o de si todo va a terminar en un baño de sangre. No. La cuestión es la resistencia psicológica. ¿Estamos en condiciones anímicas de seguir aguantando la pepla constante del procés catalán? ¿Es insoportable? ¿O no es para tanto?
Lean a nuestros poetas y dígannos con qué postura se identifican más.
NO PUEDO MÁS
por Monsieur de Sans-Foy
Lo juro por Alá: ¡no puedo más!
¡Me cuelgo de un ciruelo por los pies!
Prefiero un cubalibre de aguarrás
que el parto atravesado del prusés.
¡Y venga a desbarrar, a todo gas!
El llanto de millares de bebés,
(dotados de megáfono, además),
que enfilan al desierto, con Moisés.
Un día se me va también la olla:
¡me tiro de cabeza al Orinoco!
¡Me como una tortilla con cebolla!
¿No dejan de joder, esos malditos?
¡Respóndeme, Josepho: yo te invoco!
Que estoy para salir pegando gritos...
QUE NO ES PARA TANTO
por Fray Josepho
Que no es para tanto. Que no se sulfure.
Que no se me cuelgue, Sanfuá, de los pies.
Que no se me crispe. Que no se me apure.
Que hay cosas peores que nuestro prusés.
El cólera, el tifus, la peste bubónica,
el virus del ébola, la guerra mundial.
Manolo García tocando la armónica.
Carmena en pelotas. Un tacto rectal.
Un cáncer de colon metastatizado.
Pillarse los huevos con el ascensor.
Pisarle a tu madre lo recién fregado.
Todo esto sin duda que es mucho peor.
Así que consuélese. No llore, no gima.
Que está con nosotros Mariano Rajoy.
No ceda al desánimo. No se me deprima.
¿Qué quiere, un besito? ¡Pues yo se lo doy!