Hoy, nuestros poetas están de acuerdo en lo fundamental. Alfon y Andrés Bódalo son dos benefactores del pueblo. Dos adalides del progreso. No tienen que estar en la cárcel, porque todos sus actos han estado guiados por el amor a la gente. A los de abajo. Ambos merecen el indulto. La discrepancia está en quién de los dos lo merece más. Fray Josepho piensa que es Andrés Bódalo, el simpático sindicalista jiennense, al que Teresa Rodríguez compara con Miguel Hernández. Y Monsieur de Sans-Foy cree que quien más lo merece es Alfon, el entrañable hincha del Rayo Vallecano, cuya libertad de expresión quiere coartar la casta judicial.
QUE INDULTEN A BÓDALO
por Fray Josepho
Sus puños son del pueblo. Sus coces, de la gente.
Sus límpidos leñazos son símbolos de amor.
Sus palos son señales de un ánimo inocente,
del genio de un poeta, de alma de un cantor.
Su sello es refinado. Sus modos, distinguidos.
Su formas, versallescas. Su estilo, parisién.
Su gorra donairosa. Sus párrafos, floridos.
Orgullo de la noble provincia de Jaén.
Que indulten a este ángel. Que eximan al querube.
Que suelten a este dócil osito mimosín.
Que vuele su alma libre, su espíritu de nube,
su temple de paloma, su aliento de jazmín.
Andrés es un poeta del pueblo, y en su lucha
no encajan los barrotes que existen en prisión.
Indúltennoslo pronto. Y eviten que en la ducha
pudiera, por descuido, caérsele el jabón.
ALFON MOLA MÁS
por Monsieur de Sans-Foy
El Bódalo es genial, no cabe duda.
La gente de su cuerda, por lo visto,
le llega a comparar con Jesucristo...
¡Pues Alfon es Mahoma, Krishna, Buda!
Su juicio represivo, ¿en qué se escuda?
Pretende que el chaval iba provisto
de un chisme de explotar... por darse pisto.
Que fuera pequeñito, se la suda.
Nos quieren impedir las agresiones,
las bombas en las manifestaciones...
¡El progre está cansado de sufrir!
Atentos: cada vez le falta menos
al pacto y al Gobierno de los Buenos...
¡Entonces, vais a ver lo que es prohibir!