Parecía que la primera víctima del "derecho a decidir" sería la ruptura emocional entre Cataluña y España, pero al final acabará siendo el PSC. Las últimas encuestas de El Periódico le sitúan en un quinto puesto, ya por detrás de C’s, que alcanzaría el tercero.
Aunque aún jueguen a disimularlo, el PSC ya no es rentable para el PSOE. De ser imprescindible para sus victorias, puede pasar a ser la causa de sus derrotas. El "derecho a decidir", su desprecio por la soberanía nacional y la moción de UPyD en el Congreso de los Diputados para clarificar el galimatías han desenmascarado el concubinato. ¿Cómo han llegado a esto?
El error inicial de Alfonso Guerra apostando en plena transición por el PSC a costa de la federación del PSOE en Cataluña puso a disposición del nacionalcatalanismo las rentas electorales del PSOE. Era un secreto a voces la traición a la clase obrera, a la cultura, la lengua y la nación españolas, además de un mal negocio electoral en Cataluña que se empeñaron en ignorar, a pesar de las constantes pérdidas de apoyo, elección tras elección.
Quienes seguimos ese vía crucis sin entender los motivos del suicidio acabamos por comprender que no era un error, sino la voluntad camuflada de unos para neutralizar a las bases obreras no nacionalistas y la fatalidad del resto ante el nacionalismo.
Durante estos 30 años, el PSC ha jugado en campo nacionalista hasta quedar atrapado en él. Exactamente el mismo error que acaba de protagonizar CiU con el independentismo. Uno y otro ensancharon el espacio del adversario hasta quedarse sin espacio propio. El PSC a favor del nacionalismo, o sea, de CiU, y CiU del independentismo, o sea, de ERC. Cuando se han querido dar cuenta, sus adversarios se han hecho con el botín. Estos son los números: de los 52 diputados de 1999 ha pasado a 20 en 2012. El PSC ha perdido 32 diputados, pues. Y bajando: la última encuesta de El Periódico lo relega a la quinta posición, con solo 14-16 diputados.
No le ha ido mejor a CiU. Desde que Artur Mas provocó el adelanto electoral en 2012, ha pasado de 62 diputados a 52, y las últimas encuestas le hunden hasta los 30-32, y pierde las elecciones a favor de ERC. Si presidiera un consejo de administración, habría sido cesado fulminantemente por hundir la empresa y dejar en el paro al 50% de la plantilla.
Lo que nunca fue posible y tantas veces se pidió, ahora se oye en boca de vacas sagradas del socialismo español. Alfonso Guerra, Leguina, Bono piden abiertamente la vuelta del PSOE a Cataluña y están convencidos de que sacarían más votos que el PSC. La operación ya está en marcha, el pasado 11 de octubre buena parte de esa militancia del PSC que se ha cansado de pedir la vuelta de la federación del PSOE a Cataluña dio el primer paso: acaba de fundar el Partido Socialista Popular (PSP). Lo preside Isidro Carpio, una de los fundadores del PSC, presidente de su Consejo Nacional durante muchos años, exteniente de alcalde de Mollet, exdiputado provincial y miembro de Ágora Socialista, la asociación de disidentes que preside el histórico Pepe Castellanos. Precisamente, en Ágora Socialista dará una conferencia Pepe Bono el próximo 14 de noviembre.
Figuras relevantes del PSC y del PSOE animan y trabajan en la sombra. En tiempo de escombros, arquitectos del futuro.