L D (Agencias) El asesinato a manos de ETA del brigada Luis Conde tras una cadena de atentados durante el fin de semana ha provocado las lógicas manifestaciones de condena y apoyo a los familiares de la víctima y, por extensión, a los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y las Fuerzas Armadas. En el Congreso de los Diputados se ha escenificado la unidad de "partidos políticos y agentes sociales" a través de una declaración conjunta leída por el portavoz socialista José Antonio Alonso.
El texto parte de la declaración hecha pública tras el asesinato, el 15 de mayo de 2008 en el cuartel de Legutiano, del guardia civil Juan Manuel Piñuel. De hecho, los párrafos principales que hacen referencia a cómo luchar contra ETA, son exactos. El propósito, sobre el papel, es firme:
- Reunidos en el Congreso de los Diputados, máxima expresión de la soberanía popular, queremos expresar nuestra unidad y firmeza frente al terrorismo. Creemos en la libertad y en la democracia consagradas en la Constitución Española. Proclamamos que en ella no cabe la violencia y reiteramos nuestra voluntad de combatir con coraje y fortaleza democrática a la organización terrorista ETA hasta derrotarla definitivamente a través de la fuerza exclusiva del Estado de Derecho.
Tal compromiso de luchar "hasta derrotarla" conlleva que la única salida para los etarras es la cárcel. Así lo dijeron los políticos hace cuatro meses y así lo dicen ahora:
- ETA ha hablado de la única manera que sabe: poniendo bombas y causando dolor y tragedia. Nuestra respuesta es serena y firme: Jamás conseguirán sus objetivos, no doblegarán la democracia ni el Estado de Derecho, no conseguirán ninguna de sus pretensiones. Permaneceremos firmes en la defensa de la vida, de la libertad, de la democracia y del Estado de Derecho. A los autores de este atentado y al resto de los terroristas, sólo les espera la aplicación de la ley, la acción policial y el ejercicio de la justicia.
Sin embargo, la realidad es que el Tribunal Supremo ha tenido que ilegalizar a ANV y al PCTV cuando estos brazos de ETA ya estaban en el poder y esgrimiendo las razones que el Gobierno se empeñó en negar. Este mismo lunes, el Alto Tribunal ha hecho público el fallo sobre ANV y los ejes son los que se denunciaron cuando se solicitó su ilegalización: no condenan los atentados de ETA y colaboraron con Batasuna antes y durante la campaña electoral. La declaración conjunta tampoco recoge las demandas para que se revoque explícitamente la resolución que daba permiso al Gobierno para negociar con ETA. Y tampoco hay una intención expresa de expulsar a ETA de las instituciones, al hilo del fallo judicial.
Uno de los partidos firmantes es el PNV, que ha suscrito la declaración al tiempo que Juan José Ibarretxe seguía apostando por el diálogo. El presidente del Gobierno vasco no está "dispuesto a renunciar a la política para seguir trabajando por la paz". Ibarretxe ha dicho que "hay que tener cuidado, incluso en los días tan tristes y tan oscuros. No se puede trasladar que las ideas del lehendakari y de los tres partidos del Gobierno -PNV-EA y EB- dan oxígeno a ETA".
El encuentro celebrado el lunhes por la tarde en el Congreso fue muy breve, de unos diez minutos, tras los cuales José Antonio Alonso compareció ante los periodistas para leer la declaración, flanqueado por la portavoz del grupo popular, Soraya Sáenz de Santamaría y el diputado de CiU Josep Sánchez Llibre. Tras ellos se han situado otros dirigentes políticos y los representantes de las patronales y los sindicatos.
La declaración ha sido suscrita por todos los partidos con representación parlamentaria sin excepción (PSOE, PP, CiU, PNV, ERC, IU, ICV, BNG, CC, UPyD, Na-Bai), así como por las patronales CEOE y CEPYME y los sindicatos CCOO, UGT y USO.