LD (EFE) Media hora después de la apertura de la Bolsa de Nueva York, el índice Dow Jones de Industriales, el más importante de Wall Street, bajaba 117,57 puntos (un 1,08 por ciento) hasta 10.799,94 unidades.
Wall Street cerró el lunes con un descenso de 504,48 puntos (del 4,42 por ciento), su peor caída desde la reapertura de los mercados tras los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001.
Todas las miradas están puestas hoy en el mayor asegurador del mundo, AIG, que trata desesperadamente de buscar una inyección de capital de 40.000 millones de dólares, mientras los inversores se preguntan si la aseguradora será la próxima gran víctima de la crisis financiera.
Las acciones de AIG, que el lunes perdieron un 61 por ciento de su valor, bajaban hoy tras la apertura un 66,39 por ciento hasta los 1,6 dólares, mientras trata de evitar más rebajas de calificación por parte de las agencias. El gobernador del estado de Nueva York, David Paterson, aseguró a la cadena financiera CNBC que la aseguradora tiene un día de plazo para resolver sus problemas.
Los títulos de Goldman Sachs bajaban un 11,45 por ciento hasta los 119,99 dólares, tras anunciar que en los nueve primeros meses de su ejercicio fiscal ganó un 47 por ciento menos que en el mismo período de 2007, y que su ganancia en el tercer trimestre fue un 70 por ciento inferior a la de esa misma fecha del año anterior.
Goldman Sachs es junto a Morgan Stanley, que presentará resultados trimestrales mañana miércoles, uno de los dos grandes bancos de inversión estadounidenses que permanecen independientes tras la quiebra de Lehman Brothers y la venta de Merrill Lynch a Bank o America.
Los inversores se encuentran también pendientes de si la Reserva Federal rebajará los tipos de interés, desde el 2 por ciento actual al 1,75 por ciento como espera el mercado. El banco central estadounidense inyectó hoy otros 50.000 millones de dólares en el sistema financiero de Estados Unidos en un intento de mantener la liquidez de los mercados.
El mercado Nasdaq descendía este martes 27,15 puntos (un 1,25 por ciento) hasta 2.152,76 unidades, mientras que el selectivo S&P 500 retrocedía 20,04 puntos (el 1,68 por ciento) hasta 1.172,66 unidades. El índice compuesto NYSE, que agrupa todos los valores cotizados en Wall Street, bajaba 154,08 puntos (un 2,01 por ciento) hasta 7.526,07 unidades.
Las obligaciones a diez años subían en el mercado secundario de la deuda y ofrecían una rentabilidad, que se mueve en sentido contrario, del 3,29 por ciento frente al 3,42 por ciento del cierre del lunes.
La aseguradora AIG pierde solvencia
AIG, que hasta hace unos días era la mayor aseguradora del mundo por cotización bursátil, pierde antes del toque de campana un 56,17 por ciento, después de que ayer al cierre de Wall Street ya perdiese un 60,79 por ciento. Las dos principales agencias de calificación, Standar & Poor’s y Moody’s, han rebajado el rating crediticio de AIG, lo que alimenta aún más las sospechas de que podría seguir a Lehman Brothers y declararse en suspensión de pagos.
Goldman Sachs retrocede en la preapertura un 14,58 por ciento. La entidad ha anunciado que su beneficio se redujo en el tercer trimestre un 70 por ciento hasta situarse en 845 millones de dólares, o 1,81 dólares por acción.
Washington Mutual tampoco logra escapar de los números rojos, con una caída de un 11 por ciento en la preapertura de Nueva York. Al igual que le ha pasado a AIG, la agencia de calificación Standard & Poor’s ha rebajado su calificación crediticia ante el incremento de las turbulencias de los mercados financieros.
Fuera del sector financiero, la tecnológica Dell cae un 8,75 por ciento. El segundo mayor fabricante mundial de ordenadores personales ha anunciado que espera una mayor desaceleración de la demanda para este trimestre, debido al empeoramiento de las perspectivas económicas.