LD (Agencias) El secretario del Consejo de Seguridad Nacional de Georgia, Alexandr Lomaya, ha informado en una rueda de prensa que el Ejército ha violado el acuerdo de alto el fuego alcanzado bajo la mediación del presidente francés Nicolas Sarkozy. Según indicó, unos cincuenta blindados rusos han penetrado en la ciudad de Gori, muy cercana a la región separatista de Osetia del Sur.
Fuentes georgianas afirman que los blindados rusos han destruido las instalaciones militares de la Brigada de Artillería del Ejército de Tiflis. Esas instalaciones habían sido abandonadas por las fuerzas georgianas tras la contraofensiva de las tropas rusas en Osetia del Sur.
Lomaya añadió que los mandos rusos han permitido la entrada a Gori de "norcaucásicos que saquean casas y tiendas, y humillan a la población". El funcionario no especificó si los norcaucásicos a los que se refería eran "voluntarios" de las repúblicas rusas del Cáucaso Norte que se alistaron tras el estallido del conflicto en Osetia del Sur.
Tras exigir una investigación y castigar a los responsables, Lomaya dijo que "Rusia ha violado de manera traicionera la palabra de alto el fuego que le dio a (presidente francés Nicolas) Sarkozy". Finalmente, explicó que los atacantes exigieron la retirada de Gori de la Cruz Roja y que el Gobierno al que pertenece está organizando una misión de embajadores occidentales para que viajen con urgencia a la zona.
Disparos aislados
La ciudad de Tsjinvali, capital de la región separatista de georgiana de Osetia del Sur, permanece en calma tras el anuncio del fin de las acciones militares por parte de Rusia y Georgia. La agencia oficial de noticias rusa RIA-Novosti informó que "prácticamente no se oyeron disparos, salvo uno que otro tiro aislado" y destacó que no hubo disparos de armamento pesado, artillería y tanques. Las autoridades de la autoproclamada república de Osetia del Sur señalaron que no hubo heridos a causa de los disparos aislados, calificados de "provocación contra las tropas de paz rusas".
En el otro escenario de combate, el Ministerio del Interior de la separatista región georgiana de Abjasia informó que después de casi un día de operaciones, sus fuerzas han logrado expulsar a las tropas georgianas desplegadas en el desfiladero del Kodori.
La ofensiva abjasa para expulsar a los soldados georgianos de los altos de Kodori comenzó la madrugada del martes con el empleo de la aviación y la artillería pesada, después de que los georgianos no aprovecharan el corredor abierto la víspera para retirarse y evacuar a los civiles. El lunes pasado, Rusia creó una fuerza de choque compuesta por nueve mil soldados con el propósito declarado de prevenir un ataque georgiano contra Abjasia, aunque los separatistas afirman que los militares rusos no participaron en la ofensiva de Kodori.
Cuatro periodistas muertos
Por su parte, la organización no gubernamental "Reporteros sin Fronteras" denunció que desde el pasado viernes cuatro periodistas han muerto mientras ejercían sus labores en las zonas en conflicto. El primero ha sido el camarógrafo holandés de la RTL-2, Stan Storimans, que cayó a consecuencia de los bombardeos lanzados por el Ejército ruso sobre la ciudad georgiana de Gori. En esas mismas calles se conocía que otro periodista georgiano y el conductor que le transportaba murieron por el impacto de un obús contra su vehículo.
Este martes se informaba que miembros de las milicias separatistas de Osetia del Sur habían asesinado al director de Alania TV y corresponsal de Russian Newsweek en Georgia, Grigol Chijladze, y al director de la agencia Caucasus Press Images y corresponsal de Itar-Tass.
La organización también daba cuenta de que cuatro periodistas turcos fueron detenidos durante varias horas por soldados rusos desplegados en Osetia del Sur y del Norte. Se trata del corresponsal de la cadena turca NTV, Hilmi Hacaloglu, y su cámara, Cumhur Catkaya, detenidos en Osetia del Sur; y del enviado especial de la cadena de televisión Kanaltürk, Levent Oztürk, y su compañero gráfico, Giray Ervin, que están retenidos en "algún lugar de Osetia del Norte".
Soldados interrogados
En Moscú, la Fiscalía informó que han comenzado los interrogatorios a los prisioneros de guerra georgianos con el fin de documentar los crímenes cometidos por el Ejército de Georgia contra la población civil en Osetia del Sur. Pese a que la región separatista es un territorio que oficialmente pertenece a Georgia, un portavoz del organismo aseguró que la legislación rusa permite abrir acciones judiciales contra extranjeros que hayan cometido crímenes contra los intereses de la Federación Rusa. "El artículo 12 del Código Penal contempla la posibilidad de incoar expedientes penales contra las personas que haya cometido crímenes fuera de las fronteras de Rusia".
De acuerdo con fuentes rusas, la acusación se cimentará en los testimonios y el material que recaben los funcionarios de la Fiscalía durante la investigación sobre los crímenes cometidos contra la población de la capital suroseta, Tsjinvali, y otras localidades de la región. El caso podría ser llevado tanto ante tribunales internacionales como ante la Justicia rusa, ya que la mayoría de la población suroseta tiene la ciudadanía rusa.
Bajas georgianas
En una comparecencia transmitida por la televisión estatal, el ministro de Sanidad de Georgia, Alexandr Kvitashvili, ha informado que el ataque ruso a su territorio ha dejado al menos 175 civiles y militares muertos. Explicó que el dato abarcan las víctimas mortales que se han producido desde el viernes de la semana pasada, justo cuando estallaron las acciones militares de envergadura entre las tropas de Georgia y las fuerzas separatistas de Osetia del Sur.