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DELITO DE ABUSO SEXUAL

Condenado a pagar 4.320 euros por tocarle el culo a una amiga

Un joven ha sido condenado por un juez de Cáceres a pagar 4.320 euros a una chica que le denunció por haberle tocado el culo. Tras escuchar el relato de los implicados y de testigos, la autoridad consideró que el señalado es responsable de un delito de abuso sexual. Los hechos tuvieron lugar en una discoteca en febrero de 2005. La sentencia relata: "Con ánimo lúbrico, él se acercó a ella por la espalda, le puso la mano en el culo y se lo cogió fuertemente; al darse ella la vuelta, el acusado le manifestó `que durito lo tienes´".

Un joven ha sido condenado por un juez de Cáceres a pagar 4.320 euros a una chica que le denunció por haberle tocado el culo. Tras escuchar el relato de los implicados y de testigos, la autoridad consideró que el señalado es responsable de un delito de abuso sexual. Los hechos tuvieron lugar en una discoteca en febrero de 2005. La sentencia relata: "Con ánimo lúbrico, él se acercó a ella por la espalda, le puso la mano en el culo y se lo cogió fuertemente; al darse ella la vuelta, el acusado le manifestó `que durito lo tienes´".
(Libertad Digital) El Juzgado de lo Penal Único de Cáceres ha emitido una sentencia en la que condena a un joven a pagar 4.320 (ocho euros diarios durante dieciocho meses) euros por haber tocado el culo a una amiga. De acuerdo con el juez, la acción ha sido calificada como "constitutivo de delitos de abusos sexuales". La sentencia no es firme y puede ser recurrida ante la Audiencia Provincial.
 
Los hechos –de los que se hace eco el periódico Hoy de Cáceres– tuvieron lugar en febrero de 2005 cuando. Un grupo de amigos se encontraba, cerca de las cuatro de la madrugada, en una discoteca. La sentencia relata: "Con ánimo lúbrico, él se acercó a ella por la espalda, le puso la mano en el culo y se lo cogió fuertemente; al darse ella la vuelta, el acusado le manifestó `que durito lo tienes´". Esa afirmación, dijo el culpable, la hizo después de que la víctima le comentara que asistía al gimnasio y que se "estaba poniendo durita", mientras señalaba a su trasero.
 
El grupo de jóvenes salió de la discoteca y se fue a la casa del novio de ella "donde el acusado habría deslizado su mano por la espalda de la joven cuando se encontraba sentada, motivando que ésta se levantara para evitar que pudiera alcanzarle las nalgas".
 
El diario explica que ocho meses después de los hechos, la joven presentó la denuncia después de volver a encontrarse con el acusado y sentirse acosada. Tres días antes de que acudiera ante las autoridades, el responsable denunció al novio de la chica por una agresión.
 
Hoy indica que el juez determinó la culpabilidad de un delito de abusos sexuales porque el tocamiento se produjo sin consentimiento y "con ánimo lúbrico ", es decir, con un propósito de obtener una satisfacción del apetito sexual.
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