L D (Agencias) El presidente sirio, Bashar al Assad, espera que Francia y EEUU "aporten toda su contribución" a un acuerdo de paz entre Israel y Siria "tanto en la fase de negociación directa como en la puesta en marcha del acuerdo, incluidos los compromisos de seguridad que fueran necesarios, según la declaración común franco-siria emitida al término del acuerdo mantenido en el Elíseo entre el presidente francés, Nicolas Sarkozy y su homologo sirio.
Sarkozy, por su parte, ha puesto de relieve la "disponibilidad de Francia para responder a cualquier petición en este sentido si las partes así lo desean".
Tanto Sarkozy como Al Assad han subrayado durante su encuentro la importancia de la cuestión siria-israelí del proceso de paz y pusieron de manifiesto los progresos que se han logrado en el marco de las negociaciones indirectas mantenidas entre Siria e Israel bajo los auspicios de Turquía.
Además, Sarkozy, en nombre de la presidencia del Consejo Europeo, se comprometió a iniciar los procedimientos adecuados para la firma del acuerdo de asociación entre la Unión Europea y Siria, así como para lanzar el proceso de ratificación tan pronto como sea posible.
Finalmente, a la luz de los desarrollos positivos en la región, los dos presidentes se han comprometido a establecer un plan de trabajo para relanzar el reestablecimiento de las relaciones bilaterales con el objetivo común de reforzar los lazos políticos, económicos y culturales entre los dos países, sobre todo en el ámbito educativo, académico y lingüístico.
Por otra parte, el mandatario galo visitará Siria a invitación del presidente Al Assad antes de mediados de septiembre de 2008, una visita que se preparará durante el desplazamiento a París del viceprimer ministro sirio, Abdulá al Dardari, que visitará Francia los próximos 21 y 22 de julio, y por una próxima visita a Damasco del ministro francés de Exteriores, Bernard Kouchner.
Relaciones entre Siria y Líbano
Siria y Líbano anunciaron su disposición a establecer relaciones diplomáticas abrir representaciones diplomáticas y abrir embajadas en sus respectivas capitales, por primera vez desde su independencia.
El anuncio supone "un progreso histórico", afirmó el presidente francés, Nicolas Sarkozy, en una rueda de prensa tras una reunión junto con los presidentes de Siria, Bachar al Asad, y Líbano, Michel Sleiman, a la que también asistió el emir de Qatar, jeque Hamad Bin Jalifa al Zani, centrada en la situación libanesa
Sarkozy precisó que todavía quedan algunas "cuestiones jurídicas" por resolver, aunque insistió en la importancia del compromiso de los presidentes sirio y libanés.
Sleiman destacó el objetivo de su país de "reforzar los lazos con Siria" a la vez que Líbano reafirma "su soberanía" y desempeña el papel que le corresponde en Oriente Medio.
Asad, por su parte, aseguró que "haremos todo lo posible" para ayudar al presidente libanés, y restó importancia al hecho de que Damasco no tuviera relaciones diplomáticas con un país vecino en el que tuvo estacionadas tropas durante varios decenios. "Los libaneses pueden decidir solos su futuro", aseguró el presidente sirio, cuyo país ha ejercido de árbitro en el Líbano desde la guerra civil (1975-1990).
El nombramiento de Sleiman como presidente del Líbano se forjó tras el acuerdo logrado en Doha (Qatar) a finales de mayo pasado por las principales fuerzas políticas libanesas, tras una crisis política que se arrastraba desde finales de 2007.
El emir de Qatar reconoció que "la situación en Líbano es compleja", pero destacó que pese a todo es un país donde se vive "la alternancia democrática".
El anuncio supone "un progreso histórico", afirmó el presidente francés, Nicolas Sarkozy, en una rueda de prensa tras una reunión junto con los presidentes de Siria, Bachar al Asad, y Líbano, Michel Sleiman, a la que también asistió el emir de Qatar, jeque Hamad Bin Jalifa al Zani, centrada en la situación libanesa
Sarkozy precisó que todavía quedan algunas "cuestiones jurídicas" por resolver, aunque insistió en la importancia del compromiso de los presidentes sirio y libanés.
Sleiman destacó el objetivo de su país de "reforzar los lazos con Siria" a la vez que Líbano reafirma "su soberanía" y desempeña el papel que le corresponde en Oriente Medio.
Asad, por su parte, aseguró que "haremos todo lo posible" para ayudar al presidente libanés, y restó importancia al hecho de que Damasco no tuviera relaciones diplomáticas con un país vecino en el que tuvo estacionadas tropas durante varios decenios. "Los libaneses pueden decidir solos su futuro", aseguró el presidente sirio, cuyo país ha ejercido de árbitro en el Líbano desde la guerra civil (1975-1990).
El nombramiento de Sleiman como presidente del Líbano se forjó tras el acuerdo logrado en Doha (Qatar) a finales de mayo pasado por las principales fuerzas políticas libanesas, tras una crisis política que se arrastraba desde finales de 2007.
El emir de Qatar reconoció que "la situación en Líbano es compleja", pero destacó que pese a todo es un país donde se vive "la alternancia democrática".