L D (Agencias) Tras el aviso, la Ertzaintza ha acordonado la zona y los artificieros de la Policía autonómica han localizado un paquete sospechoso junto a una ventana. El artefacto estaba colocado en una pequeña caja de cartón en el repetidor del Monte Arnotegi, en las cercanías del Pagasarri.
La bomba contenía entre tres y cuatro kilogramos de explosivo, aún por determinar, y estalló en el momento en que fue tocada por el robot de los artificieros de la Ertzaintza, sin que se registraran heridos.
Según informó la Ertzaintza a Europa Press, en la zona sólo se encontraban los artificieros después de que las patrullas desplegadas en la zona encontraran el explosivo, cuya colocación había sido anunciada a la DYA por un comunicante anónimo sobre las nueve de la mañana. El aviso advertía de que la bomba explotaría sobre las diez de la mañana, pero estalló dos horas más tarde a consecuencia de la intervención del citado robot.
Bomba trampa
La Ertzaintza presupone que era una "trampa" contra los agentes porque estaba preparada para estallar en cuanto fuera manipulada. El artefacto disponía de un sistema antimovimiento preparado para explosionar en el momento en que fuera manipulado.