(Libertad Digital) Patxi López ha presentado este sábado el contenido de la enmienda transaccional que él mismo ha elaborado tras la presentación por parte de Juan Carlos Rodríguez Ibarra de varias sugerencias en torno a la lucha contra ETA. Entre ellas se incluía el compromiso de no negociar con ETA excepto bajo dos condiciones: la de conceder al PP capacidad de veto y la de que los terroristas se comprometieran a la disolución de la banda. Ambas han sido rechazadas.
El texto del secretario general del PSE, aprobado por unanimidad, indica lo siguiente según ha anunciado el propio López:
- "Sabiendo que, tras la ruptura del alto el fuego, no hay ninguna expectativa de diálogo, desde el Gobierno de la Nación, el PSOE se compromete a poner todos los instrumentos a su alcance y a desarrollar el máximo esfuerzo para conseguir acabar con ETA".
- Además, promete que el PSOE buscará "la máxima coordinación con el primer partido de la oposición y el resto de fuerzas democráticas".
El texto incluye también una mención al Pacto Antiterrorista en el punto en que indican que "erradicar el terrorismo es un objetivo nacional que exige la unidad de todos los españoles". En este punto recuerdan tanto este pacto como el de Ajuria Enea y también el del Congreso de los Diputados.
El contenido del programa de 2004 era muy distinto y revela hasta qué punto el PSOE incumplió sus promesas. Entre otras cosas, los socialistas recogieron entre sus compromisos lo siguiente:
- Nos comprometemos al cumplimiento escrupuloso y estricto del Pacto de Estado Por la Libertad y Contra el Terrorismo suscrito entre el Partido Socialista Obrero Español, el Partido Popular y el Gobierno de la Nación y, en especial, a renunciar a la utilización política del terrorismo; nos comprometernos a mantenerlo vivo y en vigor hasta la derrota total de ETA o su disolución efectiva.
- Nos comprometemos a la observancia estricta de la Constitución y por tanto rechazamos cualquier negociación que implique el pago de un precio político democrático por el fin de la violencia.
Las diferencias entre ambos constituyen un fiel reflejo de lo que han supuesto estos cuatro años en materia antiterrorista, tanto por los compromisos incumplidos por los socialistas como por las promesas que ahora no están dispuestos a adoptar.