L D (Europa Press) "En política exterior es siempre más importante tratar de mantener la calma, tener sangre fría, tratar de conseguir una respuesta diplomática porque no es mas fuerte quien más alto grita sino aquel que consigue defender de manera consistente los intereses españoles y para defender tenemos que mantener una línea de interlocución siempre desde el respeto y la exigencia del respeto a las instituciones, a las empresas y a los españoles", enfatizó en declaraciones a TVE.
La dirigente socialista argumentó que el Gobierno no se puede dejar llevar "por una reacción en caliente" ni "entrar en una escalada de respuestas a las provocaciones que podría alargarse "hasta el infinito" sino que lo que debe hacer es "mantener una línea de interlocución exigiendo respeto total y absoluto a dichas instituciones". "Estamos haciendo lo mejor y de la mejor manera posible", resumió.
Tras recordar que "por encima de todo" el Gobierno va a seguir defendiendo los intereses, la dignidad, de nuestro país, de nuestras instituciones y de las empresas, Jiménez recalcó que el Rey Don Juan Carlos "en todo momento fue defendido, es defendido y será defendido" por el Ejecutivo de Zapatero, que no va a "permitir" que ninguna persona vaya a "empañar" la autoridad y la legalidad del Monarca, que tiene el refrendo de todos los españoles. "Hay una defensa permanente a nuestras instituciones y no se defiende mejor la figura del Rey por el hecho de que contestemos a provocaciones y declaraciones absolutamente inadecuadas", añadió.
En esta misma línea, la secretaria de Estado para Iberoamérica reiteró que el Ejecutivo trabaja para defender los intereses de los 300.000 españoles que viven en Venezuela, así como los de las empresas españolas con negocios en este país. E incidió en que los intereses de España no se defienden mejor porque retiremos el embajador en Venezuela, sino "todo lo contrario". "Para defender intereses de España hay que tratar de aguantar un poco antes de responder porque hay mucho en juego, en riesgo y por tanto tenemos que medir todas y cada una de esas declaraciones", dijo Trinidad Jiménez, quien explicó que "se está trabajando con los instrumentos de que dispone la diplomacia" y se está exigiendo "con contundencia y claridad" respeto a los españoles y nuestras instituciones.
La secretaria de Estado recalcó, asimismo, la necesidad de seguir manteniendo las "excelentes" relaciones que España tiene con todos los países de América Latina –"como no las ha tenido nunca", dijo– y anticipó que el conflicto con Chávez no hará que España deje de relacionarse "con todos ellos". Si el presidente venezolano persiste en sus ataques el Ejecutivo "tomará las decisiones que tenga que tomar".
En este sentido, señaló que "un incidente aislado" como el de la cumbre "no significa" que eso "afecte al conjunto" de relaciones con el resto de países porque, según subrayó, hay que tener un respeto por todos los gobiernos que han sido elegidos democráticamente.