(Libertad Digital) En una entrevista en el programa Al Sur de la Semana de la Cadena COPE, Rosa Díez ha calificado de "bochornosa" la decisión del Gobierno de recusar a dos magistrados del Tribunal Constitucional. La crisis en la que está sumido el organismo tras la medida sin precedentes instada por el Ejecutivo pone en evidencia, en su opinión, la "necesidad de reformar el sistema judicial".
"Hemos aceptado como válido que el tribunal esté compuesto por jueces que trabajan como representantes de los partidos políticos", ha denunciado Díez, para quien situaciones como esta exigen un cambio "en el sistema de elección de los jueces" que acceden a las altas instituciones del Estado.
"Los jueces parece que están a las órdenes de los partidos", ha recordado la ex eurodiputada socialista antes de afirmar que "esto se cambia cambiando la Constitución". El objetivo, ha continuado, que los jueces "recuperen su autonomía". Para Díez, la situación que afronta el Constitucional significa que "tenemos una democracia muy poco sólida". "Hemos de cambiar las leyes para que no puedan hacer estas cosas", ha insistido.
Díez pide el cese de Bermejo
En la entrevista, Díez también se ha referido a las declaraciones en el Congreso de Mariano Fernández Bermejo, quien apuntó que retomarían la negociación con ETA si se dieran las condiciones. Díez ha recordado que la negociación se inició sin que ni siquiera se hubieran cumplido las condiciones de las que hablaba la resolución del Congreso y que, pese a ello, "el Gobierno decidió negociar sobre nuestra democracia con ellos". "Se van a volver a reír de nosotros", ha lamentado.
La eurodiputada ha advertido, además, que la afirmación de Bermejo "no se despacha con unas palabras del presidente del Gobierno", en alusión a las declaraciones de Zapatero desde Lisboa. "Lo que tiene que hacer es cesarle. Entonces, le creeremos", ha dicho Díez. La dirigente de UPD también ha recordado que lo que debe hacer el Gobierno "es perseguir a los etarras hasta derrotarles" y "dejarse de bobadas", en referencia a las recurrentes palabras del presidente sobre el fin de ETA y el abandono de la violencia.