L D (EFE) Los dos empates cosechados por el Barça en los dos primeros desplazamientos ligueros han reavivado entre los aficionados el recuerdo de la Liga perdida la pasada temporada y Rijkaard, el técnico que llevó al equipo a lo más alto, está en el punto de mira, hasta el punto de que dependiendo del resultado, el crédito del holandés podría iniciar una peligrosa cuenta atrás. El de este miércoles será el primero de los tres partidos que los azulgrana jugarán en casa. El equipo recibirá el sábado al Sevilla y, posteriormente, en partido intersemanal, al Zaragoza.
Frente a los lioneses, el Barça no se puede permitir ninguna alegría. A pesar de los 70 millones de euros invertidos y del intervencionismo del presidente Joan Laporta para enderezar la situación con la aplicación de un código de régimen interno, parece que el equipo no acaba de recuperarse del mazazo que le supuso perder el campeonato pasado. Rijkaard considera que la situación es coyuntural, fruto del 'virus FIFA', de la falta de entrenamientos y de descanso de sus jugadores más determinantes en este inicio de campeonato. Por eso, el holandés, a pesar de estar en la diana, no parece estar preocupado.
Con vistas a su estreno europeo, en un grupo en el que también figuran Stuttgart y Glasgow Rangers, Rijkaard recuperará a Leo Messi, que no jugó en Pamplona en previsión, después de que sufriera una contractura en el partido que jugó con Argentina en Australia. Todo apunta a que la estrella albiceleste estará entre los convocados y formará parte del equipo titular. Las dudas que genera el equipo se trasladan directamente a la alineación. Rijkaard dejó en el banquillo ante Osasuna de salida a Xavi y puso a Deco e Iniesta como acompañantes de Touré Yayá. El marfileño es el único fijo en la medular y las otras dos plazas se las reparten el trío Xavi, Deco, Iniesta. En la delantera, con la vuelta de Messi, Thierry Henry parece seguro y la duda está en Ronaldinho.
El brasileño, que ha triunfado jugando normalmente por la izquierda, actúa ahora de enlace con los dos delanteros, pero su aportación, al margen del acierto en los tiros libres, no es la de antaño. Por ese motivo, Rijkaard podría incluso plantearse variar su dibujo táctico (convertir el clásico 4-3-3 por un elástico 4-4-2) o incluso darle más protagonismo a Iniesta en la posición de enlace. En la defensa, también hay diferentes posibilidades. Milito y Abidal son los únicos fijos, mientras que Zambrotta y Oleguer pugnan por una posición en el lateral derecho y Thuram y Márquez por acompañar a Milito.
En todo caso, los precedentes son favorables al Barça, que siempre ha ganado en su estreno europeo en el Camp Nou. Si el Lyon había empezado dubitativo, llega a Barcelona en la mejor condición de toda la temporada, ya que, poco a poco, el séxtuple campeón francés ha ido encontrando su mejor juego. El esquema del nuevo técnico, Alain Perrin, comienza a ofrecer buen juego y resultados y la goleada lograda el pasado sábado en el terreno del Metz (1-5) constituyó el mejor encuentro de la nueva campaña. La máquina comienza a parecerse a la de las últimas temporadas, que llegó perfectamente engrasada a la primera fase de la Liga de Campeones en los tres últimos años, lo que se refleja en una mayor confianza de un bloque que, en los primeros envites de la temporada, fue el blanco de innumerables críticas.
Pese a la buena actitud mental que demuestran, los lioneses otorgan al Barcelona la condición de favoritos y, por el momento, se marcan como único objetivo superar la fase de grupos para, más adelante, comenzar a ponerse metas más concretas. El presidente, Jean-Michel Aulas, que considera al Barcelona favorito porque tiene "sobre el papel una plantilla superior", no renuncia a una victoria en el Camp Nou y recuerda que otros grandes de Europa ya sucumbieron al empuje lionés. Pese a que acepta que el Lyon tiene que caminar por Europa con "perfil bajo", el mandatario asegura que el objetivo será, al menos, alcanzar las semifinales, una fase que no conoce su equipo. El mensaje del presidente es admitido por el resto de la plantilla, a la imagen del joven delantero Karim Benzema, que considera que "hay que viajar a Barcelona sin miedo" porque "la presión no está sobre el Lyon".
Perrin, por su parte, confesó que ha trabajado especialmente el juego del centro del campo para tratar de taponar las iniciativas del Barcelona, al que avisó de que hay que impedirle que circule el balón demasiado deprisa. El entrenador rescatará el 4-3-3 para afrontar a los catalanes, diferente del sistema con dos atacantes que ha venido poniendo en práctica en los últimos partidos.
Frente a los lioneses, el Barça no se puede permitir ninguna alegría. A pesar de los 70 millones de euros invertidos y del intervencionismo del presidente Joan Laporta para enderezar la situación con la aplicación de un código de régimen interno, parece que el equipo no acaba de recuperarse del mazazo que le supuso perder el campeonato pasado. Rijkaard considera que la situación es coyuntural, fruto del 'virus FIFA', de la falta de entrenamientos y de descanso de sus jugadores más determinantes en este inicio de campeonato. Por eso, el holandés, a pesar de estar en la diana, no parece estar preocupado.
Con vistas a su estreno europeo, en un grupo en el que también figuran Stuttgart y Glasgow Rangers, Rijkaard recuperará a Leo Messi, que no jugó en Pamplona en previsión, después de que sufriera una contractura en el partido que jugó con Argentina en Australia. Todo apunta a que la estrella albiceleste estará entre los convocados y formará parte del equipo titular. Las dudas que genera el equipo se trasladan directamente a la alineación. Rijkaard dejó en el banquillo ante Osasuna de salida a Xavi y puso a Deco e Iniesta como acompañantes de Touré Yayá. El marfileño es el único fijo en la medular y las otras dos plazas se las reparten el trío Xavi, Deco, Iniesta. En la delantera, con la vuelta de Messi, Thierry Henry parece seguro y la duda está en Ronaldinho.
El brasileño, que ha triunfado jugando normalmente por la izquierda, actúa ahora de enlace con los dos delanteros, pero su aportación, al margen del acierto en los tiros libres, no es la de antaño. Por ese motivo, Rijkaard podría incluso plantearse variar su dibujo táctico (convertir el clásico 4-3-3 por un elástico 4-4-2) o incluso darle más protagonismo a Iniesta en la posición de enlace. En la defensa, también hay diferentes posibilidades. Milito y Abidal son los únicos fijos, mientras que Zambrotta y Oleguer pugnan por una posición en el lateral derecho y Thuram y Márquez por acompañar a Milito.
En todo caso, los precedentes son favorables al Barça, que siempre ha ganado en su estreno europeo en el Camp Nou. Si el Lyon había empezado dubitativo, llega a Barcelona en la mejor condición de toda la temporada, ya que, poco a poco, el séxtuple campeón francés ha ido encontrando su mejor juego. El esquema del nuevo técnico, Alain Perrin, comienza a ofrecer buen juego y resultados y la goleada lograda el pasado sábado en el terreno del Metz (1-5) constituyó el mejor encuentro de la nueva campaña. La máquina comienza a parecerse a la de las últimas temporadas, que llegó perfectamente engrasada a la primera fase de la Liga de Campeones en los tres últimos años, lo que se refleja en una mayor confianza de un bloque que, en los primeros envites de la temporada, fue el blanco de innumerables críticas.
Pese a la buena actitud mental que demuestran, los lioneses otorgan al Barcelona la condición de favoritos y, por el momento, se marcan como único objetivo superar la fase de grupos para, más adelante, comenzar a ponerse metas más concretas. El presidente, Jean-Michel Aulas, que considera al Barcelona favorito porque tiene "sobre el papel una plantilla superior", no renuncia a una victoria en el Camp Nou y recuerda que otros grandes de Europa ya sucumbieron al empuje lionés. Pese a que acepta que el Lyon tiene que caminar por Europa con "perfil bajo", el mandatario asegura que el objetivo será, al menos, alcanzar las semifinales, una fase que no conoce su equipo. El mensaje del presidente es admitido por el resto de la plantilla, a la imagen del joven delantero Karim Benzema, que considera que "hay que viajar a Barcelona sin miedo" porque "la presión no está sobre el Lyon".
Perrin, por su parte, confesó que ha trabajado especialmente el juego del centro del campo para tratar de taponar las iniciativas del Barcelona, al que avisó de que hay que impedirle que circule el balón demasiado deprisa. El entrenador rescatará el 4-3-3 para afrontar a los catalanes, diferente del sistema con dos atacantes que ha venido poniendo en práctica en los últimos partidos.
Alineaciones probables
FC Barcelona: Valdés; Zambrotta, Márquez, Gabi Milito, Abidal; Touré Yayá, Xavi, Deco; Ronaldinho, Messi y Henry
Olympique de Lyon: Vercoutre; Reveillere, Squillaci, Bodmer, Grosso; Toulalan, Juninho, Kallstrom; Keita o Ben Arfa, Benzema y Govou
Árbitro: Massimo Busacca (Suiza)
Estadio: Camp Nou. 20.45 horas (Canal +)
FC Barcelona: Valdés; Zambrotta, Márquez, Gabi Milito, Abidal; Touré Yayá, Xavi, Deco; Ronaldinho, Messi y Henry
Olympique de Lyon: Vercoutre; Reveillere, Squillaci, Bodmer, Grosso; Toulalan, Juninho, Kallstrom; Keita o Ben Arfa, Benzema y Govou
Árbitro: Massimo Busacca (Suiza)
Estadio: Camp Nou. 20.45 horas (Canal +)
Inmejorable debut para el Sevilla
El Sevilla FC debutará en la Liga de Campeones y lo hará a lo grande, en el nuevo estadio del Arsenal londinense, el Fly Emirates, y ante uno de los mejores conjuntos ingleses y de la máxima competición continental, algo que no amedrenta a un equipo que se ha ganado el respeto en Europa. Si el Arsenal, actual líder de la Liga inglesa, es un clásico en el continente y un habitual de la Liga de Campeones, el Sevilla vuelve a la máxima competición cincuenta años después como recién campeón de dos copas de la UEFA (2006 y 2007) y una Supercopa de Europa (2006), además de ser segundo clasificado en la competición doméstica con un partido menos que el primero, el Real Madrid.Además, el conjunto andaluz se ha clasificado para la fase de grupos después de superar con rotundidad en la previa al AEK de Antenas que dirige Lorenzo Serra Ferrer, al que le endosó un 6-1 en el total de la eliminatoria. Estos datos hacen del choque como uno de los más atractivos de la primera jornada de la 'Champions', algo que ha tenido en cuenta la afición sevillista, que en un número aproximado a los 1.500 estarán en las gradas del estadio londinense.
El entrenador del conjunto español, Juande Ramos, ha desplazado hoy a diecinueve jugadores, entre ellos tres que descansaron en el último partido de Liga ante el Recreativo del Huelva, el alemán Andreas Hinkel, el francés Julien Escudé y el brasileño Luis Fabiano. Por contra, el interior zurdo brasileño Adriano Correia no se ha restablecido por completo de la lesión que le ha impedido debutar esta temporada y se une al capitán Javi Navarro, también lesionado, en una lista de ausencias en la que además figuran, por decisión del entrenador, el centrocampista belga Tom de Mul, el defensa colombiano Aquivaldo Mosquera y el delantero marfileño Arouna Koné, tres de los fichajes veraniegos.
Los desplazados a Londres son los porteros De Sanctis y Palop; los defensas Daniel Alves, Escudé, Hinkel, Boulahrouz, Fazio y Dragutinovic; los centrocampistas Martí, Maresca, Keita, Poulsen, Renato, Jesús Navas, Capel y Duda; y a los delanteros Luis Fabiano, Kerzhakov y Kanouté.
Por parte del Arsenal, el buen momento que atraviesa el club del norte de Londres tiene mucho que ver con la sintonía existente entre el técnico francés Arsene Wenger y el español Cesc Fábregas y lo que pasa a día de hoy en el campo es un reflejo de esta asociación. Cesc, además de fabricar juego y destruir el del contrario, ya marca goles. Tres lleva en Liga, más que en toda la temporada pasada, y dos en la 'Champions'. "Antes no podía marcar un gol. Eso te demuestra lo importante que es lo que pasa por la cabeza", explicó Wenger, uno de los causantes del cambio mostrado por el español.
Los días felices del Arsenal se vieron confirmados el pasado 7 de septiembre con una gran noticia para el aficionado 'gunner': el nuevo contrato del entrenador francés, que dirigirá al equipo hasta el 2011. "Mi corazón está atado a este club. Firmar un nuevo contrato fue siempre mi intención", explicó Wenger. De hecho, según el canal público británico, una de las señales que apuntaron la continuidad de Wenger la ofreció Cesc Fábregas el pasado julio, cuando afirmó que permanecería al lado de su técnico en el Emirates Stadium.
Si el Arsenal asusta ya en la 'Premier', en Europa se mostró invulnerable frente al Sparta de Praga, un veterano de la 'Champions League', al que doblegó en la previa por un contundente 5-0 entre la ida y la vuelta. Precisamente en esa eliminatoria Cesc Fábregas dedicó uno de sus goles al recientemente fallecido Antonio Puerta, con el que coincidió como internacional sub-21. La baja más significativa, por la polémica que lo rodea en las últimas semanas y su nefasto comienzo de liga, es la del meta alemán Jens Lehman, que será sustituido, una vez más, por el español Manuel Almunia, considerado "número uno" ahora mismo para Wenger.
Alineaciones probables
Arsenal: Almunia; Sagna, Touré, Silva, Cliché; Hleb, Cesc Fábregas, Rosicky, Flamini; Adebayor y Van Persie
Sevilla FC: Palop; Dani Alves, Boulahrouz, Escudé, Dragutinovic; Jesús Navas, Poulsen, Keita, Duda; Luis Fabiano y Kanouté
Árbitro: Peter Frojdfeldt (Suecia)
Estadio: Fly Emirates. 20.45 horas (Canal +2)