LD (EFE) Datos de la Contabilidad Nacional trimestral difundidos por el Instituto Nacional de estadística (IME) revelan que durante el segundo trimestre del presente año el PIB español ha crecido una décima menos que el mismo periodo precedente. En términos intertrimestrales, la renta nacional registró un crecimiento del 0,9 por ciento, una décima menos que en el trimestre anterior.
Los datos destacan que el crecimiento del 4 por ciento de la economía española fue resultado de una demanda interna más moderada y de una aportación negativa del sector exterior sin cambios. Según el INE, en el periódico el empleo creció entre abril y junio un 3,2 por ciento, lo que equivale a la creación neta de más de 590.000 puestos de trabajo a tiempo completo en un año.
En este sentido, la demanda interna aumentó el 4,9 por ciento -una décima menos-, influenciada sobre todo por la desaceleración del consumo, mientras se mantuvo la inversión, y el sector exterior siguió restando nueve décimas al aumento del PIB, debido a la "común aceleración" en este periodo de exportaciones e importaciones. El consumo final de los hogares se moderó una décima -creció el 3,3 por ciento- debido, según el INE, al tono "menos expansivo" del gasto en bienes duraderos y servicios, en un contexto en el que también empeoró ligeramente la confianza de los consumidores.
En cuanto a las actividades, el informe señala que la construcción se moderó cuatro décimas -hasta un crecimiento del 4 por ciento- debido a la desaceleración observada "tanto en la edificación como en la ingeniería civil". Mientras, la industria moderó su crecimiento tras el repunte de inicios de año, y aumentó el 4,8 por ciento -siete décimas menos-.
No obstante, la actividad del sector energético creció el 3,5 por ciento, lo que muestra una importante aceleración con respecto al trimestre anterior, en que se había reducido en el mismo porcentaje. De esta forma, el conjunto de las actividades industrial y energética se aceleró hasta el 4,6 por ciento, siete décimas más que entre enero y marzo.
Unos datos "muy positivos", según Vegara
El secretario de Estado de Economía, David Vegara, consideró este miércoles que las cifras de Contabilidad Nacional muestran el "buen momento por el que pasa la economía" española, pese a la "suave desaceleración" del crecimiento, que en el segundo trimestre fue del 4 por ciento. Vegara calificó de "muy positivo" este aumento del Producto Interior Bruto, que muestra que siguen siendo "fuertes" tanto el ritmo de la actividad económica como de la creación de empleo, que aumentó en este periodo un 3,2 por ciento.
El secretario de Estado señaló que se están cumpliendo las previsiones del Gobierno en cuanto a la evolución de los principales componentes del crecimiento económico, como en el caso de la demanda interna, que continúa su "suave pero progresiva desaceleración", y que en el segundo trimestre aportó 4,9 puntos al crecimiento. También el consumo de los hogares, dijo, continúa una "muy ligera" desaceleración, porque en su opinión sigue habiendo "condiciones favorables" para el gasto, como la creación de empleo.
Para Vegara, lo más destacable un trimestre más es el alto porcentaje en la inversión en bienes de equipo, que en su opinión es uno de los factores que más empujan el crecimiento y que aumentó el 13 por ciento. También destacó la inversión en otros productos, que se aceleró dos puntos y aumentó el 4,3 por ciento y recordó que en este capítulo se encuentra la inversión en componentes también productivos como el software.
Para Vegara, pese a que la construcción se ha desacelerado en mayor medida que otros sectores, sigue creciendo a "tasas robustas", tanto en inversión como actividad, y la moderación registrada responde a las previsiones del Gobierno sobre este sector tanto para este año como para 2008. La inversión en construcción aumentó el 4,5 por ciento en el segundo trimestre, seis décimas menos que en el primero. En su última revisión del cuadro macroeconómico, publicada en julio, el Gobierno estimó que la construcción cerrará este año con un crecimiento del 5,1 por ciento, y del 3,8 por ciento el que viene.
Por otra parte, y un día antes de conocerse el indicador adelantado del Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) Vegara recordó que el efecto base de los precios de los carburantes, que bajaron considerablemente hace ahora un año, tendrá efectos "alcistas" sobre la inflación española en los próximos meses.
El secretario de Estado señaló que se están cumpliendo las previsiones del Gobierno en cuanto a la evolución de los principales componentes del crecimiento económico, como en el caso de la demanda interna, que continúa su "suave pero progresiva desaceleración", y que en el segundo trimestre aportó 4,9 puntos al crecimiento. También el consumo de los hogares, dijo, continúa una "muy ligera" desaceleración, porque en su opinión sigue habiendo "condiciones favorables" para el gasto, como la creación de empleo.
Para Vegara, lo más destacable un trimestre más es el alto porcentaje en la inversión en bienes de equipo, que en su opinión es uno de los factores que más empujan el crecimiento y que aumentó el 13 por ciento. También destacó la inversión en otros productos, que se aceleró dos puntos y aumentó el 4,3 por ciento y recordó que en este capítulo se encuentra la inversión en componentes también productivos como el software.
Para Vegara, pese a que la construcción se ha desacelerado en mayor medida que otros sectores, sigue creciendo a "tasas robustas", tanto en inversión como actividad, y la moderación registrada responde a las previsiones del Gobierno sobre este sector tanto para este año como para 2008. La inversión en construcción aumentó el 4,5 por ciento en el segundo trimestre, seis décimas menos que en el primero. En su última revisión del cuadro macroeconómico, publicada en julio, el Gobierno estimó que la construcción cerrará este año con un crecimiento del 5,1 por ciento, y del 3,8 por ciento el que viene.
Por otra parte, y un día antes de conocerse el indicador adelantado del Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) Vegara recordó que el efecto base de los precios de los carburantes, que bajaron considerablemente hace ahora un año, tendrá efectos "alcistas" sobre la inflación española en los próximos meses.