(Libertad Digital) La gira de Zapatero por Cataluña empieza con trastornos. Su vicepresidente económico no da su brazo a torcer sobre la financiación de Cataluña, que el Tripartito presidido por Montilla espera especialmente abundante, ahora que se aproximan Elecciones Generales y los diputados catalanes tienen la probable llave de la renovación de la mayoría del PSOE en el Congreso.
En Radio Nacional, Pedro Solbes, ha insistido en que el Gobierno "cumplirá escrupulosamente con el aumento de la inversión en infraestructuras tasado en el Estatuto".
Continúa el ministro diciendo que "Lo que se pactó fue un aumento de la inversión en infraestructuras. Es cierto que el aumento de la inversión total del Estado –no sólo infraestructuras– en Cataluña será por un porcentaje inferior al estipulado en el Estatuto, pero es que éste tasa sólo, de manera específica, el aumento de la inversión en infraestructuras, y el Gobierno cumplirá escrupulosamente con ese mandato. Yo entiendo los argumentos del Gobierno catalán, pero no es lo que dice el Estatuto".
Esto ha argumentado con sequedad el vicepresidente para Asuntos Económicos, a menos de veinticuatro horas de que Rodríguez Zapatero visite Cataluña con una primera remesa de dádivas y pregones a los afectados por el apagón eléctrico de los últimos días.
Los 2.500 euros "nos los podemos permitir"
Solbes ha asumido con enfática disciplina la súbita promesa de Zapatero de entregar 2.500 euros a las familias por cada nuevo natalicio, a partir del pasado 3 de julio. Cerúleo, sin el festivo entusiasmo que han exhibido el presidente y su ministro de Trabajo, Jesús Caldera, el vicepresidente financiero ha admitido que "nos lo podemos permitir" en la actual situación de liquidez del Estado.
"Una parte", ha explicado, "se financiará con los recursos del IRPF, los que no sean declarantes lo recibirán con fondos del Ministerio de Trabajo. Es cierto que se trata de una importante iniciativa", ha subrayado Solbes, diplomático, "pero en este momento se puede hacer frente a esto".
Algo más optimista se ha mostrado el ministro de Economía y Hacienda sobre la tramitación de su proyecto de Presupuestos para 2008. "Hace meses, previmos que el apoyo parlamentario sería menor que el del año pasado", dijo Solbes en el informativo España a las 8, de Radio Nacional, quien, sin embargo, reconoce que el acuerdo con el PNV sobre el llamado cupo vasco le ha hecho concebir la idea de que "el Presupuesto es posible, seguramente con dudas o reticencias de algunos grupos y con alguna que otra abstención, pero, en todo caso, la abstención podría favorecernos".