(Libertad Digital) La ministra de Vivienda, María Antonia Trujillo no ha podido escoger peor día para aplaudir su propia gestión. Mientras la titular del departamento de Vivienda, aseguraba en una entrevista en televisión, que "hoy" existe "un mercado inmobiliario más amplio, con más respiro" en el que "los jóvenes que quieren acceder a una vivienda lo pueden hacer perfectamente", se publicaban tres estudios estadísticos que apuntan en dirección opuesta.
Precisamente, en lo que se refiere a la juventud, el Consejo de la Juventud de España (CJE) pedía a los nuevos ejecutivos autonómicos y locales que se coordinaran con el Estado en materia de vivienda. En este estudio advierten que el esfuerzo de los jóvenes para poder comprar una vivienda libre alcanzó el 69 por ciento de su salario al cierre de 2006, más de 10 puntos por encima de los niveles alcanzados un año antes y más del doble del nivel recomendado que está fijado en el 30 por ciento. Según el CJE, la progresiva subida de los tipos de interés no se vio compensada por la desaceleración de los precios de la vivienda y provocó esta realidad.
Una situación que se ve agravada cuando hablamos del segmento comprendido entre los 18 y los 24 años. En este caso el esfuerzo se eleva hasta el 93,4 por ciento de su salario. No obstante, en esta franja la tasa de emancipación se sitúa por debajo del 30 por ciento, como en el caso de los trabajadores entre 25 y 29 años, cuyo esfuerzo es el 71,1 por ciento, porcentaje que cae hasta el 58,6 por ciento entre los 30 y los 34 años.
Por su parte, el Consejo Económico y Social (CES), constata en su memoria de 2006 que a pesar de que los precios de la vivienda, tanto nueva como usada, vienen sufriendo un ajuste gradual a la baja, las posibilidades de acceso a una vivienda han seguido deteriorándose. Esto ha provocado un considerable aumento del endeudamiento familiar, que ha llegado a alcanzar el 125 por ciento de su renta bruta disponible.
Unos análisis que apuntan en la misma dirección que la Asociación Hipotecaria Española (AHE) cuyo análisis advierte que el crecimiento acumulado de los tipos de interés puede estar produciendo tensiones en los presupuestos de aquellas familias "más apalancadas" en el crédito hipotecario.
Además advierten que el 78 por ciento de las familias que tienen contratados préstamos a tipo variable están pagando más ahora por sus hipotecas que inicialmente. Según la AHE, este porcentaje se incrementa aún más si se contempla la contratación de los préstamos entre los años 2003 y mediados de 2005. De este modo, y dada la configuración exclusivamente variable de la cartera hipotecaria, aproximadamente el 98 por ciento del volumen total de préstamos ha estado expuesto en mayor o menor medida al impacto de la política monetaria.
Por si fuera poco, el Euribor ha alcanzado este jueves su nivel más alto desde mayo de 2001. El principal indicador de las hipotecas, se ha situado en el 4,373 por ciento y acumula la vigésima subida mensual consecutiva. Como consecuencia de este incremento, las familias pagan 88,24 euros más cada mes y 1.058 euros más al año. Además, las entidades financieras han endurecido notablemente los criterios de concesión de nuevos préstamos para adquisición de vivienda y de nuevos créditos para consumo durante el primer trimestre del año, según la Encuesta sobre Préstamos Bancarios correspondiente a enero.