(Libertad Digital) El ex presidente del Gobierno español presentó en Buenos Aires el informe de la Fundación FAES sobre Iberoámerica, bajo una premisa clara. Esta región es una parte fundamental y debe apostar por los valores occidentales como garantía de progresos, desarrollo frente a los modelos totalitarios teñidos de indigenismo y militarismo que encarna el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, y que intenta expandir con la ayuda de algunos gobiernos satélites.
José María Aznar, en una conferencia en la Universidad Católica de Argentina, señaló que "América Latina es parte sustancial de Occidente" y que esta consideración la que cimenta el estudio "América Latina: Una agenda de libertad" de FAES. Aznar explicó que "Occidente es un sistema de valores universales. Esos valores han permitido los mayores avances de la humanidad. Son valores que se basan en el concepto de la persona como ser libre y responsable, titular de una dignidad inalienable y de unos derechos fundamentales previos a cualquier sistema político. La democracia, el Estado de Derecho, los derechos humanos y las libertades individuales son los principios que se encuentran en el corazón mismo de la civilización occidental".
Aznar dijo que él no cree "en las maldiciones históricas" ya que "no hay ninguna razón para que Latinoamérica no alcance los niveles de prosperidad y libertades de las naciones más avanzadas".
Frente a los valores occidentales, Aznar alertó del peligro que representan quienes, como el presidente venezolano, pretenden implantar en la región "el populismo revolucionario, el estatismo, el indigenismo racista y el militarismo nacionalista", bajo la formulación del "socialismo del siglo XXI". El presidente de FAES señaló que esto es "muy preocupante, si recordamos la miseria y opresión que generó el socialismo real del siglo XX".
Para avanzar en "la vía que han recorrido los países que tienen éxito: El camino de la apertura al mundo, de la democracia, del respeto a las libertades individuales y de la vigencia efectiva del Estado de Derecho", Aznar apostó porque Iberoamérica "estreche aún más sus lazos con Estados Unidos y Europa", y abandone el "antiamericanismo rancio" que utilizan algunos sectores pata justificar todos los males de la región.