L D (EFE) Las elecciones autonómicas ocasionaron que el PP perdiera la mayoría absoluta en el Parlament, al obtener 28 diputados, al tiempo que los socialistas y el resto de las fuerzas de la oposición alcanzaran 27 escaños, y la fuerza nacionalista Unió Mallorquina (UM), revalidara los tres que ya tenía, lo que le convierte en el partido "clave" para los pactos.
Fuentes consultadas por EFE en los partidos de Baleares informaron de que el candidato del PSIB-PSOE a la Presidencia del Govern balear, Francesc Antich, llamó la pasada madrugada, tras conocerse los resultados, a los líderes del resto de partidos con representación parlamentaria, incluido el presidente en funciones, Jaume Matas (PP).
En esa llamada, que las fuentes calificaron de "cortesía", varios interlocutores de Antich coincidieron en que era preciso darse "tiempo" para reflexionar sobre los diferentes pactos que se deben alcanzar para configurar una mayoría de gobierno.
La primera cuestión que deberán clarificar los partidos es si las negociaciones se abren "en un sólo paquete", es decir, que incluya también pactos para el Consejo de Mallorca y el Ayuntamiento de Palma -en los que el PP tampoco tiene mayoría absoluta- o si "cada institución se negocia por separado".
Clarificado este asunto, según las mismas fuentes, los partidos deberán precisar si es preciso negociar un gobierno de coalición o un pacto de legislatura que permita gobernar en minoría, sin la presencia de todos.
Fuentes del PP consultadas por EFE dijeron que "la clave" está en lo que decida Unión Mallorquina, con quien ha mantenido esta legislatura un pacto en el Consejo de Mallorca "que no ha acabado bien".
"Hay que ser realistas, pero no optimistas", dijeron las citadas fuentes, que se lamentaron de que el PP "ha sido el partido más votado de todos, pero sin una mayoría suficiente para todo". "O sea -concluyeron esas fuentes- tenemos minoría mayoritaria, pero gobernar no depende de nosotros".
Fuentes del PSIB-PSOE, por su parte, dijeron a EFE que "lo difícil, hacer perder la mayoría absoluta el PP, ya está hecho, pero ahora viene lo complicado".
Estas mismas fuentes indicaron que los socialistas prefieren gobernar "de acuerdo con los programas", pero son conscientes de que todo dependerá "de lo que diga UM".
Los socialistas, de acuerdo con estas fuentes, son "relativamente optimistas" sobre la posición que pueda adoptar UM en las negociaciones. "El PP ya intentó en el gobierno de 1995, en la época de Cañellas, arramblar a UM, y ahora Matas le ha montado una campaña de desprestigio", recordaron.
Estas fuentes explicaron, además, que los socialistas tienen ahora el gobierno de tres de los cuatro consejos insulares de Baleares y opción a gobernar en esta última, y se preguntaron, ante un eventual pacto PP-UM: "¿Hay algún gobierno capaz de gobernar con la mayoría de las islas en contra?".
La líder de UM, Maria Antònia Munar, por su parte, no desveló esta mañana en una entrevista radiofónica sus preferencias para un pacto y se limitó a decir que ahora es el tiempo "de reflexionar" y analizar todas las opciones.
Las fuentes consultadas coincidieron también en el que "caso Andratx" no ha sido la clave de la pérdida de la mayoría absoluta, "pero sí, porque desmotiva a la gente", de la abstención, que se situó en el 38,35.
Los partidos, de acuerdo con el calendario del nuevo Estatuto de Baleares, disponen hasta el 16 de junio para negociar el gobierno del Ayuntamiento de Palma y hasta el 11 de julio para pactar los ejecutivos autonómico e insular de Mallorca.
Una de las fuentes consultadas por EFE concluyó: "En Mallorca, la isla de la calma, hoy nos hemos dado tiempo...".
Fuentes consultadas por EFE en los partidos de Baleares informaron de que el candidato del PSIB-PSOE a la Presidencia del Govern balear, Francesc Antich, llamó la pasada madrugada, tras conocerse los resultados, a los líderes del resto de partidos con representación parlamentaria, incluido el presidente en funciones, Jaume Matas (PP).
En esa llamada, que las fuentes calificaron de "cortesía", varios interlocutores de Antich coincidieron en que era preciso darse "tiempo" para reflexionar sobre los diferentes pactos que se deben alcanzar para configurar una mayoría de gobierno.
La primera cuestión que deberán clarificar los partidos es si las negociaciones se abren "en un sólo paquete", es decir, que incluya también pactos para el Consejo de Mallorca y el Ayuntamiento de Palma -en los que el PP tampoco tiene mayoría absoluta- o si "cada institución se negocia por separado".
Clarificado este asunto, según las mismas fuentes, los partidos deberán precisar si es preciso negociar un gobierno de coalición o un pacto de legislatura que permita gobernar en minoría, sin la presencia de todos.
Fuentes del PP consultadas por EFE dijeron que "la clave" está en lo que decida Unión Mallorquina, con quien ha mantenido esta legislatura un pacto en el Consejo de Mallorca "que no ha acabado bien".
"Hay que ser realistas, pero no optimistas", dijeron las citadas fuentes, que se lamentaron de que el PP "ha sido el partido más votado de todos, pero sin una mayoría suficiente para todo". "O sea -concluyeron esas fuentes- tenemos minoría mayoritaria, pero gobernar no depende de nosotros".
Fuentes del PSIB-PSOE, por su parte, dijeron a EFE que "lo difícil, hacer perder la mayoría absoluta el PP, ya está hecho, pero ahora viene lo complicado".
Estas mismas fuentes indicaron que los socialistas prefieren gobernar "de acuerdo con los programas", pero son conscientes de que todo dependerá "de lo que diga UM".
Los socialistas, de acuerdo con estas fuentes, son "relativamente optimistas" sobre la posición que pueda adoptar UM en las negociaciones. "El PP ya intentó en el gobierno de 1995, en la época de Cañellas, arramblar a UM, y ahora Matas le ha montado una campaña de desprestigio", recordaron.
Estas fuentes explicaron, además, que los socialistas tienen ahora el gobierno de tres de los cuatro consejos insulares de Baleares y opción a gobernar en esta última, y se preguntaron, ante un eventual pacto PP-UM: "¿Hay algún gobierno capaz de gobernar con la mayoría de las islas en contra?".
La líder de UM, Maria Antònia Munar, por su parte, no desveló esta mañana en una entrevista radiofónica sus preferencias para un pacto y se limitó a decir que ahora es el tiempo "de reflexionar" y analizar todas las opciones.
Las fuentes consultadas coincidieron también en el que "caso Andratx" no ha sido la clave de la pérdida de la mayoría absoluta, "pero sí, porque desmotiva a la gente", de la abstención, que se situó en el 38,35.
Los partidos, de acuerdo con el calendario del nuevo Estatuto de Baleares, disponen hasta el 16 de junio para negociar el gobierno del Ayuntamiento de Palma y hasta el 11 de julio para pactar los ejecutivos autonómico e insular de Mallorca.
Una de las fuentes consultadas por EFE concluyó: "En Mallorca, la isla de la calma, hoy nos hemos dado tiempo...".