L D (Europa Press) En declaraciones a RNE, Moraleda explicó que se debe diferenciar entre los planos político y judicial y que, "tal y como ocurre en cualquier democracia", la política "debe respetar a la justicia". "El Tribunal Constitucional ha dicho claramente que la Fiscalía General y la Abogacía del Estado tenían razón, el PP lo que tiene que hacer es callarse y acatar", reiteró. Por eso, rechazó las críticas vertidas contra las resoluciones judiciales y aseguró que "criticar la sentencia del Tribunal Constitucional es pasar una ralla más allá del respeto".
Moraleda, que aseguró que el presidente de Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, llama habitualmente al líder del PP, Mariano Rajoy, para informarle sobre la lucha antiterrorista, defendió que los ciudadanos "están muy por encima" de la actualidad política y mediática y lamentó que "el principal problema" es que "cuando se habla de vivienda, el PP hablar de ETA; cuando se habla de jóvenes, el PP hablar de ETA; y cuando se habla de mayores, el PP habla de ETA". "Si quitamos ETA al PP no queda nada", aseveró.
En este contexto, desmintió "con rotundidad" las informaciones que apuntan que el Gobierno mantuvo reuniones con la organización terrorista tras el atentado de Barajas y achacó estas noticias a que "últimamente la información circula muy rápidamente y se contrasta poco". Así, lamentó que el Ejecutivo "tenga que estar desmintiendo falsedades cuando debieran desmentirse por sí solas".
Además, criticó que "desgraciadamente" el Congreso se convertirá "en un acto de propaganda política" cuando Rajoy cuestione al jefe del Ejecutivo sobre esta cuestión. Moraleda acusó al PP de llevar al Parlamento la "decisión política" de "atacar" al Gobierno en cuestiones sobre lucha antiterrorista y defendió que "en España se puede ser conservador pero se debe tener sentido de Estado".
El secretario de Estado de Comunicación advirtió de que la crispación tiene entre sus principales objetivos alejar a los ciudadanos de las urnas e indicó que, por ese motivo, es "tan contaminante para la salud política la actitud del PP". Por ello, rechazó que "haya bronca", sino que, según defendió, "hay alguien que quiere bronca todos los días". En este sentido, enmarcó la propuesta de Rajoy de que gobierne el partido más votado a que el PP, con su política, no tiene posibilidad de alianzas "de ningún tipo" y aseveró que las próximas elecciones municipales son unas primarias para el presidente del PP dentro de su partido. Además, auguró que los cambios autonómicos que se produzcan en los comicios del próximo día 27 serán a favor del PSOE, aunque no quiso indicar ninguna comunidad autónoma en concreto.