(Libertad Digital) No mereció tamaño castigo el Madrid al descanso. Justo el día que mejor jugaba en el Bernabéu, tocando con fluidez y entrando por las bandas con autoridad, a los blancos les llegaron tres sustos en forma de goles, todos ellos con la firma del máximo artillero de la Copa de la UEFA, Walter Pandiani. Un error de Guti en la entrega propició la contra que inició Jonatas, tocando para Rufete, y que culminó el uruguayo con el 0-1 al cuarto de hora de partido. En la banda izquierda coincidieron Guti y Roberto Carlos. No es la mejor pareja para defender y por ahí Rufete hizo mucho daño.
Segundo contragolpe del Espanyol, y segundo gol. Éste llegaría unos diez minutos después, también con Jonatas, Rufete y Pandiani como protagonistas. Pero el Madrid no se vino abajo. Los locales estaban disfrutando de varias y buenas ocasiones, buscando recortar distancias, y lo lograrían sólo tres minutos después con un tanto del 'pichichi' de la Liga, un Ruud Van Nistelrooy que suma ya 21 dianas. Pero era el día del 'Rifle' Pandiani, que marcó un tercer y polémico gol. Fue protestado por la grada y se pidió fuera de juego, aunque finalmente el árbitro Undiano Mallenco hizo que subiera al marcador. La afición madridista acabó despidiendo con pitos al colegiado navarro cuando el primer tiempo llegaba a su fin.
Tras el descanso, Capello cambio el guión del partido y volvió a acertar con los cambios. Esta vez quitó a Guti, el héroe ante el Sevilla, y Cicinho para dar entrada a José Antonio Reyes e Iván Helguera. Sergio Ramos pasó a la derecha, Cannavaro compartió con el cántabro el centro de la zaga, buscando más agresividad, mientras Pandiani no podía seguir con ese festival. Reyes se echó al costado izquierdo, su sitio natural. Y de inmediato apareció Raúl en busca de la remontada. Con coraje, corazón y calidad, el capitán asustó al Espanyol en cinco minutos intensos de agobio. Marcó el 2-3 y su equipo volvió a enchufarse al partido.
Hacía mucho tiempo que el estadio no vibraba como ahora. Pero el caso es que el Real Madrid de este sábado, 12 de mayo, ha sido un Madrid de casta y fe. Y eso llevó al 3-3, obra de Reyes. El tanto indignó a Kameni por entender que hubo falta previa de Higuaín. El Madrid se estaba jugando la Liga y acabó siendo un vendaval sobre el área de Kameni. Ernesto Valverde, pensando en la final de UEFA, reservó a Coro, Luis García y Jarque, que tuvieron sus minutos en el segundo tiempo. Costa y Jonatas hicieron un esfuerzo descomunal en el medio centro, aunque enfrente tuvieron a Emerson y a Diarra. El brasileño ha cambiado radicalmente su relación con la afición. Reyes, muy fresco, encaraba a Lacruz por el costado izquierdo tras la marcha de Velasco. Forzó faltas en ese lado, pero el gol de Higuaín, cuando el partido ya casi tocaba a su fin, terminaría llegando por el otro. El argentino enganchó un balón de oro y batió a Kameni para darle medio título de Liga al Madrid.
Segundo contragolpe del Espanyol, y segundo gol. Éste llegaría unos diez minutos después, también con Jonatas, Rufete y Pandiani como protagonistas. Pero el Madrid no se vino abajo. Los locales estaban disfrutando de varias y buenas ocasiones, buscando recortar distancias, y lo lograrían sólo tres minutos después con un tanto del 'pichichi' de la Liga, un Ruud Van Nistelrooy que suma ya 21 dianas. Pero era el día del 'Rifle' Pandiani, que marcó un tercer y polémico gol. Fue protestado por la grada y se pidió fuera de juego, aunque finalmente el árbitro Undiano Mallenco hizo que subiera al marcador. La afición madridista acabó despidiendo con pitos al colegiado navarro cuando el primer tiempo llegaba a su fin.
Tras el descanso, Capello cambio el guión del partido y volvió a acertar con los cambios. Esta vez quitó a Guti, el héroe ante el Sevilla, y Cicinho para dar entrada a José Antonio Reyes e Iván Helguera. Sergio Ramos pasó a la derecha, Cannavaro compartió con el cántabro el centro de la zaga, buscando más agresividad, mientras Pandiani no podía seguir con ese festival. Reyes se echó al costado izquierdo, su sitio natural. Y de inmediato apareció Raúl en busca de la remontada. Con coraje, corazón y calidad, el capitán asustó al Espanyol en cinco minutos intensos de agobio. Marcó el 2-3 y su equipo volvió a enchufarse al partido.
Hacía mucho tiempo que el estadio no vibraba como ahora. Pero el caso es que el Real Madrid de este sábado, 12 de mayo, ha sido un Madrid de casta y fe. Y eso llevó al 3-3, obra de Reyes. El tanto indignó a Kameni por entender que hubo falta previa de Higuaín. El Madrid se estaba jugando la Liga y acabó siendo un vendaval sobre el área de Kameni. Ernesto Valverde, pensando en la final de UEFA, reservó a Coro, Luis García y Jarque, que tuvieron sus minutos en el segundo tiempo. Costa y Jonatas hicieron un esfuerzo descomunal en el medio centro, aunque enfrente tuvieron a Emerson y a Diarra. El brasileño ha cambiado radicalmente su relación con la afición. Reyes, muy fresco, encaraba a Lacruz por el costado izquierdo tras la marcha de Velasco. Forzó faltas en ese lado, pero el gol de Higuaín, cuando el partido ya casi tocaba a su fin, terminaría llegando por el otro. El argentino enganchó un balón de oro y batió a Kameni para darle medio título de Liga al Madrid.
Real Madrid, 4: Casillas; Cicinho (Helguera, m.46), Sergio Ramos, Cannavaro, Roberto Carlos; Diarra, Emerson, Guti (Reyes, m.46); Higuaín, Raúl (Torres, m.90) y Van Nistelrooy
RCD Espanyol, 3: Kameni; Velasco (Jarque, m.74), Lacruz, Torrejón, Chica; Eduardo Costa, Jonatas, Rufete (Coro, m.67), Moha; Ángel y Pandiani (Luis García, m.59)
Goles: 0-1, m.14: Pandiani; 0-2, m.26: Pandiani; 1-2, m.29: Van Nistelrooy; 1-3, m.33: Pandiani; 2-3, m.48: Raúl; 3-3, m.56: Reyes; 4-3, m.88: Higuaín
Árbitro: Undiano Mallenco (Colegio navarro). Mostró tarjeta amarilla a Moha (m.52), Chica (m.54), Kameni (m.57), Torrejón (m.57) y Jonatas (m.81), por parte del Espanyol; y a Sergio Ramos (m.60) e Higuaín (m.90), por el Real Madrid
Incidencias: Partido correspondiente a la trigésima cuarta jornada de Liga en Primera División disputado ante unos 80.000 espectadores que llenaron el estadio Santiago Bernabéu. Alfredo di Stéfano, presidente de honor del Real Madrid, entregó a Fabio Cannavaro los trofeos que le acreditan como mejor jugador del mundo en la pasada temporada