(Libertad Digital) Juan Antonio Ruiz Castillo subrayó al presentar el acto que uno de los objetivos es manifestar que "no es tolerable permanecer en silencio ante amenazas de estados totalitarios, que preconizan la desaparición de otro estado democrático, la negación del Holocausto y el derecho de un pueblo a vivir en paz", en referencia al actual Gobierno iraní.
Por su parte, Acosta señaló en declaraciones a los medios de comunicación que desconoce si dentro de las filas del PSOE hay sectores que discrepen de la decisión de algunos de sus miembros de apoyar el manifiesto. Tras destacar que la defensa del estado de Israel merece todo el apoyo porque se trata de un "hecho moral", remarcó que el Gobierno español "mantiene relaciones estrechas y amistosas" con el país hebreo, al tiempo que subrayó que el reconocimiento de que Israel es una realidad jurídico-política no entra en contradicción con la Alianza de Civilizaciones propuesta por el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero.
Mientras el presidente de la Comunidad Judía en España, Jacobo Israel Garzón, recordó que fue un gobierno socialista, el de Felipe González, el que en 1986 estableció las relaciones diplomáticas con Israel, el presidente de ASEI, Fernando Álvarez, lamentó que "las noticias que llegan de Oriente Próximo sólo muestren a un fuerte y a un débil". Sin embargo, Álvarez explicó que la labor de ASEI a partir de ahora consistirá en hacer desaparecer esta perspectiva que han adoptado los medios de comunicación y promover la concienciación de la sociedad "hacia quién nos parecemos más", alegando en este sentido que "los españoles nos parecemos mucho a los israelíes".
El manifiesto lleva el título de "Israel y la defensa del progreso democrático en España", y lamenta el "discurso antisemita, antijudío y antiisraelí, pretendidamente de izquierdas" que "está anclado en consignas elaboradas en Europa desde finales de los años 60 del pasado siglo". Los firmantes declaran que "quienes rechazamos tanto el legado intelectual soviético como el utilitarismo político de la extrema derecha, buscamos usar los rigurosos instrumentos del pensamiento crítico en defensa de los valores occidentales de libertad, igualdad, justicia y fraternidad".
En el texto declaran que "desde hace años, hay un pesado silencio en la izquierda española en lo que concierne a la defensa del Estado de Israel" cuyos valores "democráticos, políticos, sociales, económicos, culturales y religiosos", son comparables a "cualquier Estado democrático de Occidente". Ese silencio "es el de miles de hombres y mujeres de izquierdas que asistimos con tristeza a los reiterados ataques políticos, intelectuales y periodísticos contra Israel".
Pero, continúa el manifiesto, "no somos pocos los izquierdistas en España que apreciamos y valoramos el valor ético y político que supone para la Humanidad la existencia de Israel en un mundo amenazado por la intolerancia y el fundamentalismo". Tampoco "los que militando en los partidos, sindicatos y asociaciones de izquierdas en España podemos y debemos contribuir a que las manipulaciones y las extorsiones que se producen en contra de Israel sean combatidas dialéctica y democráticamente".
Este grupo de personalidades de la izquierda proclama que "la bandera de la causa de Israel no puede quedar sólo en manos de quienes desde la derecha española pretenden ostentar la exclusividad en su defensa". Es más, "la defensa de Israel no es exclusivo deber de ningún partido u organización ideológica, sea de izquierdas o de derechas, sino deber de todos los demócratas". El texto considera que "en las orillas occidental y oriental del Mediterráneo, centenares de miles de hombres y mujeres libres, ciudadanos de Israel y España, estamos unidos por un mismo ideal sostenido a lo largo de generaciones. Cada mujer y cada hombre tienen derecho a ser quien quiera ser y serlo viviendo con la seguridad que sólo brinda la libertad individual y política".
El texto sale en "defensa del derecho del pueblo israelí a tener su propio Estado-nación conforme a lo dictaminado en todas las resoluciones de la ONU desde noviembre de 1947".
El acto convocó a varios socialistas de renombre, como el Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, el dirigente Nicolás Redondo Terreros, el ex alcalde de Madrid Juan Barranco o ex ministros como Julián García Vargas o Javier Sáez de Cosculluela, mayoritariamente en pertenecientes al sector guerrista. El manifiesto ha sido iniciativa de la Asociación Solidaridad España-Israel.