(Libertad Digital) El presidente del Partido Popular de Andalucía, Javier Arenas, afirmó que en España "no hay una sociedad crispada, sino una sociedad escandalizada por los últimos acontecimientos que han tenido lugar en nuestro país", y añadió que lo que hay en España "no es crispación, sino desgaste del gobierno de Zapatero".
En el transcurso de un acto en Huelva para presentar las firmas recogidas por el PP andaluz en su campaña para reclamar la puesta en marcha de una Ley contra la Violencia de Género, Javier Arenas declaró que "Zapatero tiene alergia a la transparencia, por eso no quiere explicarnos en qué consiste su política antiterrorista".
Para Javier Arenas "lo que va contra la libertad y la democracia es lo que ha hecho el Gobierno con De Juana y con Otegui". En este sentido recalcó que "el Gobierno está cada vez más solo y el PP más acompañado". Por último, sobre la entrevista ofrecida por Otegui en la que aparecen banderas vascas y navarras, afirmó que fue "una burla al estado de derecho", al tiempo que recordó a Zapatero que "la política no puede estar por encima de las leyes ni de la Justicia".
Arenas explicó que el presidente del Gobierno "no debe esperar al fin de esta legislatura para explicarnos cuál es su política de lucha en contra del terrorismo". Además, acusó a Zapatero de ser "muy cínico para quejarse de crispación y al mismo tiempo plantear en una guía del candidato las próximas campañas electorales como una guerra". "La única batalla que debemos ganar es la de la lucha contra el terrorismo", subrayó.
"El PP acepta las críticas, pero no los insultos"
Por otra parte, el dirigente popular se refirió a la "libertad del PP para defenderse de los insultos". Arenas dijo que "los medios de comunicación en España tienen libertad de expresión; y el PP tiene libertad de elección para decidir a qué entrevistas y programas acude". "Tampoco se puede decir que las manifestaciones del PSOE son democráticas y las del PP no lo son. El derecho a manifestarse es un ejercicio de democracia", recordó.
Arenas añadió que "el PP acepta las críticas, pero no los insultos, las injurias, ni las calumnias; y el que quiera ver cómo está la libertad de expresión que se venga a Andalucía quince días".