(Libertad Digital) El País responde a la decisión del PP de defenderse de las calumnias de Jesús Polanco con una portada aparentemente científica que indicaría la confianza de la población en sus tesis editoriales –identificadas con las políticas del Gobierno– y el repudio de la línea de oposición del PP.
El compuesto propagandístico se completa con un artículo editorial que arranca desde la primera plana con el título ¿Hasta dónde está dispuesto a llegar Rajoy?, y en el que, en un tono tenebroso, se advierte que "lo grave de la deriva que está tomando el que debiera ser el gran partido conservador español es que está afectando a las instituciones y al clima general, precisamente en un momento excepcional por los niveles de prosperidad, de bienestar y de madurez de la sociedad española".
El País deja claro que no va a reparar en dramatismo para intentar amedrentar al presidente del PP.
El Instituto Opina, dirigido por la asesora de José Luis Rodríguez Zapatero, Josefina Elías, ha preparado un sondeo según el cual el PSOE obtendría hoy el 42% de los votos –42,6% en 2004– y el PP un 38,5% –37,6% en 2004–. Esta "confianza" en el PSOE, asegura El País, "tiene reflejo en la política antiterrorista". Pese a que la mayoría –un 58%– rechaza la prisión atenuada al etarra De Juana, también considera la mayoría que el Gobierno debe volver a dialogar con ETA –48,4% frente al 39,2 en contra– y no creen que Navarra o la unidad de España peligren.
Para mayor refrendo de la línea editorial de El País, su propio sondeo sostiene que los ciudadanos culpan al PP de la crispacion –54%– y un 66% "reprueba la sucesión de manifestaciones".
Uno de los indicadores más llamativos alerta del desplome de la popularidad de Mariano Rajoy. Su apreciación por la gente se ha hundido al 3,5 sobre 10, y ya es menos valorado que Gaspar Llamazares –3,7–. En El País de la asesora de Zapatero, su jefe roza el aprobado, con un 4,8.
Con semejante autoridad científica, el diario de Jesús Polanco lanza un duro editorial contra Rajoy, que concluye con una sentencia fatalista: "España merece otra oposición. Los votantes y militantes del Partido Popular merecen otros dirigentes".