L D (Agencias) La Audiencia Provincial de Stuttgart decidió el pasado febrero la puesta en libertad de Mohnhaupt, de 57 años, tras purgar parte de una pena a cinco cadenas perpetuas más 15 años de cárcel. Mohnhaupt perteneció a la cúpula de la RAF, la banda fundada por Andreas Baader y Ulricke Meinhof, entre 1977 y 1982, cuando fue capturada.
La ex terrorista participó en las acciones que llevaron a los asesinatos del banquero Jürgen Ponto, del fiscal federal Siegfried Bubak, así como en el secuestro y asesinato del jefe de la patronal Hanns-Martin Schleyer, todos en otoño de 1977.
De acuerdo con el citado portavoz de la justicia bávara, Mohnhaupt salió de la cárcel de Aichach entre las 2.00 y las 3.00 de la madrugada hora local, y no se ha dado a conocer el destino de la ex rea.
La puesta en libertad de la ex miembro de la RAF, organización que se autodisolvió mediante un comunicado en 1998, se consideraba inminente, tras la decisión de Stuttgart, aunque no se había anunciado la fecha en concreto.
La ex terrorista participó en las acciones que llevaron a los asesinatos del banquero Jürgen Ponto, del fiscal federal Siegfried Bubak, así como en el secuestro y asesinato del jefe de la patronal Hanns-Martin Schleyer, todos en otoño de 1977.
De acuerdo con el citado portavoz de la justicia bávara, Mohnhaupt salió de la cárcel de Aichach entre las 2.00 y las 3.00 de la madrugada hora local, y no se ha dado a conocer el destino de la ex rea.
La puesta en libertad de la ex miembro de la RAF, organización que se autodisolvió mediante un comunicado en 1998, se consideraba inminente, tras la decisión de Stuttgart, aunque no se había anunciado la fecha en concreto.
Mohnhaupt es una de los cuatro últimos miembros de la RAF que seguía en prisión con condenas a cadena perpetua, junto con Christian Klar, de 54 años, Eva Sybille Haule, de 52, y Birgit Hogefeld, de 50. En las semanas pasadas, tras la decisión del tribunal de Stuttgart, se habló de una posible excarcelación también de estos últimos ex miembros de la RAF aún en prisión.
Dicha audiencia se amparó para su decisión a una sentencia del Tribunal Supremo de hace quince años según el cual toda persona, aún los condenados a cadena perpetua, tienen derecho a la perspectiva de una vida en libertad.
El caso que se presenta más complejo, sin embargo, es el de Klar, quien asimismo lleva más de 24 años en la cárcel, por el revuelo causado por unas recientes declaraciones suyas, en un mensaje dirigido a una conferencia del diario marxista Junge Welt.
En el mensaje, Klar manifestó su esperanza de que se concluya los "planes de derrotar el capital y se abra la puerta a otro futuro diferente", cuestión que desató protestas en contra de una posible excarcelación o indulto.
Ya cuando se habló de la pronta puesta en libertad de Mohnhaupt surgieron críticas de los familiares de sus víctimas, que aducían en ni ésta ni sus compañeros pidieron nunca perdón por el dolor causado con sus atentados.
El semanario Focus informaba en su última edición de que Mohnhaupt tiene previsto instalarse en la ciudad de Karlsruhe y trabajar en un taller de componentes de automóvil, propiedad del hijo de una amiga suya. Esta publicación apuntaba, asimismo, que esa misma ciudad vive la madre de Klar y que, caso de salir éste en libertad, se les ordenaría mantenerse a distancia y no tener contactos.
Dicha audiencia se amparó para su decisión a una sentencia del Tribunal Supremo de hace quince años según el cual toda persona, aún los condenados a cadena perpetua, tienen derecho a la perspectiva de una vida en libertad.
El caso que se presenta más complejo, sin embargo, es el de Klar, quien asimismo lleva más de 24 años en la cárcel, por el revuelo causado por unas recientes declaraciones suyas, en un mensaje dirigido a una conferencia del diario marxista Junge Welt.
En el mensaje, Klar manifestó su esperanza de que se concluya los "planes de derrotar el capital y se abra la puerta a otro futuro diferente", cuestión que desató protestas en contra de una posible excarcelación o indulto.
Ya cuando se habló de la pronta puesta en libertad de Mohnhaupt surgieron críticas de los familiares de sus víctimas, que aducían en ni ésta ni sus compañeros pidieron nunca perdón por el dolor causado con sus atentados.
El semanario Focus informaba en su última edición de que Mohnhaupt tiene previsto instalarse en la ciudad de Karlsruhe y trabajar en un taller de componentes de automóvil, propiedad del hijo de una amiga suya. Esta publicación apuntaba, asimismo, que esa misma ciudad vive la madre de Klar y que, caso de salir éste en libertad, se les ordenaría mantenerse a distancia y no tener contactos.