(Libertad Digital) El pasado martes, 27 de febrero, Joan Clos hacía un oscuro augurio sobre el destino de la oferta de E.On por el capital de Endesa: para el ministro de Industria resultaba más probable que triunfara "un pacto" en torno a Acciona a que E.On lograse imponerse con su OPA. Los datos conocidos entonces no parecían respaldar este juicio, pero esa misma tarde se sabía del movimiento de Enel, que había comprado un 9,99 por ciento de Endesa. Las sospechas de que el ministro se refería a la italiana cuando adelantaba un pacto del que no daba más detalles llegaron hasta la CNMV, que en una dura nota hacía a la italiana ocho preguntas sobre cuándo tomó la decisión y compró las acciones y le pedía una "relación exhaustiva" de las "personas o instituciones españolas" con que se reunió antes de entrar en Endesa, entre otras cosas.
José Blanco achacó la coincidencia entre las palabras de Clos y el movimiento de Enel a una "buena intuición", pero la empresa pública italiana reconoció que, como había adelantado la prensa, Clos se había reunido con los italianos el 16 de febrero, para tratar su posible entrada en Endesa. Cuatro días más tarde se produciría la cumbre hispano-italiana, con la entrevista en Ibiza de Romano Prodi y José Luis Rodríguez Zapatero, tras la cual se desbloquearían varios movimientos empresariales españoles en el otro país. Moraleda se vio forzado a justificar al ministro, diciendo que "es casi una obligación" de Clos estar al tanto de esta operación.
En su respuesta a la CNMV, Enel declaró que había tomado la decisión el mismo día 27, y que fue entonces cuando adquirió el 9,99 por ciento inicial de Endesa. Esta versión ha sido puesta en duda por el diario El País, que informó este lunes de que UBS, que fue la intermediaria de la italiana, compró grandes cantidades de acciones de la eléctrica los días 23, 26 y 27 de febrero, antes de lo reconocido por la italiana. Como reconoce el diario, este dato refuerza "las tesis que ven en la intervención de Enel una maniobra del Gobierno". Mientras, la empresa pública continuaba su compra de acciones de Endesa, hasta desbancar a Acciona como primer accionista.